Mi bebé leon 🐾 Jaehi

Capitulo Final 🐾 Mi pequeña y desastrosa familia

Tener dos cachorros no era fácil, cambiar dos pañales, preparar dos biberones, cargar a dos bebés que no paran de llorar y cuidar a dos pequeños cachorritos enfermos nunca fue tarea fácil, pero Asahi jamás se arrepentiría de haber tenido a sus dos pedacitos de amor.

—Papá dame u pan— Pidió Jaehyun señalando la bolsa con panecillos rellenos de dulce que estaba sobre la mesada.

—Papá a tambe quele pan— Pidió esta vez Hyunjae tratando de alcanzar los panecillos por si mismo.

—Si amor, ya les daré panecillos a ambos— El mayor tomo la bolsa con panecillos para dirigirse hasta el sofá con sus dos pequeños cachorros detrás de él, con tres añitos ambos leoncitos se la pasaban hablando y correteando por toda la casa dejando sus juguetes esparcidos y queriendo tomar cada cosa que veían, aun no sabían pronunciar muchos sonidos pero de igual manera se las arreglaban para hacer todo un alboroto de gritos emocionados y fuertes carcajadas, Sunoo y Niki siempre venían a jugar y la casa parecía mucho más una guardería.

Jaehyun y Hyunjae eran dos leoncitos grandes y sanos, muy pocas veces se enfermaban y aprendían rápidamente, Jaehyun a veces era un poco llorón recordándole a Jaehyuk cuando Asahi era un niño y lloraba por cada cosa pero además de eso sus bebés eran como dos pequeños angelitos que a veces rompían las cosas o peleaban por un juguete habiendo dos iguales, siendo Kyngio el principal motivo de peleas ya que solo era un Kyngio y un león de felpa y ambos querían al pececito dorado.

—Papá mio— Sollozo Hyunjae tirando de una de las piernas de una jirafa de felpa.

—Nooo papá miooo— Sollozaba mucho más fuerte Jaehyun, en la cesta con juguetes había otra jirafa completamente igual pero para los cachorros era mucho más fácil llorar por una que ir en busca de la otra.

El día solía ser muy ruidoso, Jaehyuk a veces venia a almorzar en casa y en otras ocasiones Asahi vestía a sus niños y llamaba a uno de los choferes para visitar al castaño a la empresa y que su abuelo también pudiera lucir a sus nietos y lo grandes que estaban cada vez.

Sunoo casi siempre estaba con Asahi luego de que su madre empezase a trabajar junto a Jisung, el pequeño gatito ya había compartido lo suficiente con su tío Asahi incluso desde antes de que nacieran los gemelos así que no era un problema quedarse a dormir con sus tíos, a veces sus papás viajaban y Sunoo pasaba todo ese tiempo junto a Jaehyuk y Asahi que ya consideraban al gatito de cabellos negros como a un hijo más.

—Asahi es mío mío mío y solo mío— Burlaba el pequeño subiéndose sobre las piernas de su tío para abrazarlo, Sunoo ya tenia nueve años pero seguía siendo tan pequeñito y delgadito, además de muy dulce y coqueto, que seguía queriendo ser tratado como un bebé.

—¿Qué es esto? ¿Estas tratando de quitarme a mi gatito?— Pregunto indignado Jaehyuk siguiéndole el juego al menor.

—El tío Sahi es mío— Repitió el pequeño envolviéndose con los brazos del japonés para que este también lo abrazara.

—No, Asahi es solo mío— Defendió Jaehyuk haciéndose un espacio en el sofá para abrazar al peliblanco.

—Mio mio— Jaehyun había estado jugando con los bloquecitos pero al ver que los mayores estaban jugando decidió unirse colgándose de una de las piernas de su papá gatito.

—No mio no mio— Imito Hyunjae al ver a su hermano, yendo hasta su papá pero abrazando a Jaehyuk en lugar de Asahi.

El peliblanco simplemente se dejaba hacer, abrazando un poquito a cada uno y riendo fuertemente cuando Hyunjae mordió a su papá león para que lo levantase.

Para ellos los días eran ruidosos desde que amanecía hasta que volvía a ser de noche, los gemelos dormían una o dos horas por las tardes y eso les bastaba para reponer energías hasta la noche cuando caían rendidos luego de un corto baño y colocarse los pijamas.