¿Vale la Pena Seguir?

Capítulo 4 ¡¿WTF?!

¡¿Es en serio?! Justo cuando estoy a punto de besarlo...¡¿Llaman?! No me queda más opción que responder.

-¿Hola?- Digo frustrada.

-¿Lina? ¿Eres tú?- Dice la persona desde el otro lado de la línea.

-Aamm.... ¿Sí?

-¡Lina soy Vanessa!

-¿Vanessa Knowles?

-¡Esa misma!

-¡Amiga! ¡Que gusto saber de ti!

-¡O sea, soy yo!- No puedo evitar soltar una pequeña risa.

-Mira, ¿podemos hablar más tarde? Es que ahora estoy algo.... ocupada...

-Claro. Llamé para decirte algo rápido.

-Pos dime.

-Voy a ir a la misma escuela que tú.

-¿Si?¿Cuándo?

-¡El lunes!- Logro escuchar su chillido de emoción.

-¡Que bien!

-Bueno, te marco al rato ¿Ok?

-Ok- Corto la llamada.

No sé cómo darle la cara a Kendall. Me siento algo.... apenada. Bueno, la verdad no sé cómo me siento.

-Yo... lo siento... -Digo algo avergonzada.

-No... el que se debe disculpar soy yo... no debí hacerlo.

-Y... ¿Por qué lo hiciste?

-Por... -Vacila por unos segundos antes de responder. - Por nada.

-Pero...

-Lo siento, me tengo que ir. -Me pasa de largo.

-No esper...

Para cuando quise hablar, él ya se había ido. Dejandome sola. Son al rededor de las 3:15 de la tarde. Así que decido ir a dormir un rato.

Suena el condenado despertador. Me levanto y tomo una rápida ducha. Salgo del baño envuelta en una toalla y abro las puertas del closet. Hoy quiero ir algo linda. No sé por qué. Tomo unos shorts negros, una blusa manga larga a cuadros y mis Converse. Generalmente siempre voy en Jean con una blusa sencilla. Pero hoy no. Además, ¡Es viernes! -¡Woo Hoo!- Bajo las escaleras. Me preparo un sándwich rápido, me cepillo los dientes y tomo mi camino hacia la escuela.

Llego y encuentro a Melanie en mi casillero. ¿Qué carajos hace allí?

-¿Se te ofrece algo?- Le digo intentando sonar tranquila.

-Sí- Me responde- Tu dignidad-Estúpida...

Pongo los ojos en blanco. Me percato que desapareció de mi campo de visión, así que opto por abrir mi casillero. ¿Pero qué carajos...? De la nada un montón de fea pintura verde se encuentra adherida a mi cuerpo y cara. Maldita sea, sólo pudo ser ella.

-¡MELANIE!- Grito realmente furiosa.

-¡Oh, lo siento cariño!-De la nada aparece con una falsa sonrisa.-¡Sonríe!- Tiene un celular en la mano y toma una foto. Espera... ¡¿Acaba de tomar una foto?!

Se da vuelta y desaparece entre el montón de estudiantes que se están burlado de mí. La odio. Odio a todos. Me odio...

-Señor director. ¿Usted podría darme permiso para ir a mi casa y... arreglarme?

-Por supuesto- Me responde- Pero ¿Quién le hizo eso?

-Melanie... Melanie Monroe.-Digo con amargura.