Guerra de idiotas.

Capitulo 31:

Nunca había estado tanto tiempo sin que me pase algo raro.

En ese momento, estaba sola en mi habitación, acostada en la cama desecha mientras escuchaba música con los auriculares. Ya me había puesto la alarma para ir a limpiar los baños con Alex.

Me puse a tararear el ritmo de Blank Space cuando de repente se abre la puerta y Deasie y Marie entran, para mi sorpresa, totalmente desnudas.

-¡Por dios, Marie, hace muchísimo calor! - Dijo Deasie, mientras tomaba mi cepillo de pelo y se ponía a desenredar el suyo.

-No hace calor, Deasie, estas excitada, que es otra cosa - Bromeo la otra, retocándose el maquillaje.

Ninguna de las dos noto mi presencia, y si lo hicieron no dieron señales de ello.

-¿Como me queda? - Pregunto Marie, poniendo la boca de pato para lucir su labial.

Nunca entendí porque la mayoría de las chicas ponen la boca de pato.

-Igual que a mi - Bromeo Deasie y ambas comenzaron a reírse como niñas de 5 años.

En ese momento la puerta se vuelve a abrir, dejando entrar a Alex a la habitación:

-Ho...- Llego a decir, hasta que vio a las gemelas, todavía sin ropa. 

Me di cuenta que los segundos pasaban y Alex no movía la mirada, así que tosí falsamente -cosa que ya me había servido antes- y Alex me miro.

Le puse un gesto, y el tartamudeo:

-Emm... Si, Lucy, vine por ti, ya es la hora de ir...- Pero, otra vez, se vio interrumpido por las gemelas, que recién ahora se daban cuenta de la presencia de su amigo.

-¡Hola! - Dijo una, tirándose arriba de Alex, abrasándolo.

-¿Que haces aquí? - Comento la otra, imitándola.

Esto seguro deja un trauma, pensé.

Marie y Deasie estaban colgadas de Alex, completamente desnudas

Casi muero de la risa cuando vi que Marie tenia un lunar gigante en la pompa derecha y Deasie en la izquierda.

Una nueva forma de diferenciarlas.

Volví a hacer una tos falsa, esta vez mas fuerte, para que las gemelas se despegaran de Alex,  pero solo logre que me de tos de verdad, tanto que casi me atraganto. Levante los brazos y me fui caminando, todavía tosiendo, al escritorio para tomar algo de agua.

Cuando ya estaba mejor, volví a ver a Alex.

El abrió mucho los ojos e hizo un gesto con la boca, mientras agitaba los brazos, mostrándome que no las estaba tocando. Dio dos pasos hacia atrás, pero las gemelas no lo soltaban

--¿Chicas? -Pregunto Alex - ¿Me sueltan?

-Oh, si, si, claro - Dijeron a la vez, se despegaron de el y volvieron a sus asuntos.

Alex me miro y ambos soltamos una risita compartida.

En eso comienza a sonar mi alarma, era hora de ir a limpiar baños.

......

Hoy nos tocaba el baño del director. 

Nunca nadie había entrado allí, y nunca había limpiado un baño, así que la experiencia era totalmente nueva.

El baño del director era precioso. Wow, nunca creí que iba a decir que un baño era precioso, pero así era. Tenia el lavamanos y otros muebles con productos para el cabello, totalmente modernos. Todo estaba decorado con blanco y rojo, los colores de la escuela, y hasta había una ducha, con puertas de vidrio. Solo le faltaba un inodoro de oro parlante y ya podía entrar a un concurso para baños.

Ambos nos sentamos en el piso, con una canasta llena de raros productos y trapos.

-¿Que es esto? - Le pregunte a Alex, tomando una botella con un liquido rosa.

-Que se yo, tu solo ponla en algún lugar que de perfume y listo.- Me respondió, mientras se peleaba con un guante de goma.

-No... se abre - Dije, haciendo fuerza con la tapa de la botella. Pero se ve que apreté demasiado fuerte, porque la tapa se rompió y el liquido rosado salio volando, enchastrandole la cara a Alex. 

Trate de disculparme, pero no podía ni hablar de la risa. tenia toda la cara rosa.

-Ah no, no sabes en lo que te metiste. - Contesto Alex, tomando una botella gruesa con liquido verde, lo abrió y lo apretó en mi dirección, manchándome toda de la rara sustancia.

Ahogue un grito y me pare, abrí un mueble lleno de productos y tome dos, los abrí rápidamente y me voltee hacia donde estaba Alex, pero no llegue ni a mirarlo cuando algo pegajoso me empapo el pelo.

-¡EL PELO NO, IDIOTA! -Grite, apretando los dos productos, ambos le cayeron en todo el cuerpo, pero se aparto mientras lo seguía apretando, y el liquido voló manchando toda la pared. -¡Mira lo que hiciste! 

-¿Yo? Tu fuiste la que lo apretó.- Dijo Alex, haciéndose el inocente.

Volví a apretar el liquido y, esta vez, lo recibió de lleno.

El no se quedo con los brazos cruzados y tomo dos latas de pintura que estaban en la canasta, y me las tiro en la cabeza. Yo lo imite. Y cuando iba a tomar otra arma, me resbale con un jabón que había en el piso. Caí sobre el, pero Alex no estaba en una buena posición, así que caímos los dos, tirando mas latas de pintura sobre nosotros, al suelo frió.

Quedamos a unos centímetros de distancia, ambos riéndonos de lo sucedido.

-Estas echo un arcoiris -Bromeo

-Y tu pareces vomito de unicornio - Le conteste.

Pero cuando las risas pararon y tomamos conciencia de nuestra posición, no pude controlar mi cuerpo y, casi sin darme cuenta, lo estaba besando, de nuevo.

Nunca antes había besado así, nunca antes había sentido ese fuego en el estomago cuando besaba a alguien. Pero con Alex era imposible no convertirse en una fogata viviente. El cuerpo me ardía con cada movimiento de su lengua en mi boca, con cada beso en el cuello, cada gemido.

Sin pensar lo que hacia, comencé a tirar del borde de la camiseta de Alex, hasta que cortamos el beso y se la quite, el me imito y se deshizo de mi remera.

Por un segundo se me vino a la mente que tenia simplemente un bra blanco con un lazo en medio, y seguramente el había visto miles de bra hermosos y sensuales. Pero no me importo, no lo suficiente, porque seguí besándolo.

Un escalofrió me recorrió el cuerpo cuando el comenzó a desabrocharme el bra. Todo el miedo, la vergüenza, todo desapareció y solo quedamos el y yo.

Lo ayude con el broche, ya que no quería que me lo rompa, y tiro el corpiño a un lado. Sentí su boca, subiendo y bajando por mi cuello, haciéndome gemir.

Comencé a acariciarle el abdomen, nerviosa por saber si lo estaba haciendo bien, pero mis nervios se esfumaron cuando comenzó a gemir. 

Note que sus manos mas bajaban mas allá de mis caderas, y comenzaban a desabrochar el botón de mi short. 

-¿PERO QUE SIGNIFICA ESTO? - Grito una voz ajena a la situación. Ambos giramos la cabeza, sabiendo lo que nos esperaba. 

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Primero que nada, disculpen a Marie y Deasie, algo muy bochornoso les paso, por eso estaban desnudas, y tan tranquilas con ello. 

Quizá, solo quizá, lo suba como un extra cuando termine la novela :D

Ojala pueda, yo también quiero compartirles lo que les hicieron.

Pero dejemos a las gemelas de un lado y díganme ¿Les gusto el capitulo?

Déjenme sus opiniones en los comentarios.