Capítulo IV: Welcome to San Fierro

550 23 2
                                    

Ya se acercaba el nuevo año, 1987. Sabía que en ese año muchas cosas cambiarían. Luego de los trabajos con los Vagos, recibía mucho dinero, y hacía mucho que no veía a Carl o a Sweet... El 20 de diciembre, atacamos un almacen de los Rifas, que contenía algunos paquetes de ellos. Seguimos el procedimiento de siempre: tomar todo, escapar de los Rifas, e irnos al aeropuerto. Esa vez, Poppa dijo que posiblemente recibamos un ataque, y nos dijo a mi, a John, y a José, que vayamos con el a San Fierro. Era la primera vez que salía de la ciudad. El vuelo fue bastante tranquilo, pero en cuanto aterrizamos en Easter Basin, la cosa se puso fea. Llegaron unos cuantosTampas, y de ellos salieron varios Rifas, que nos atacaron con sus AKs y Macs... saqué la vieja Tec-9 de CJ, y balee a muchos de ellos... pero no todos salimos ilesos.

- Maldita sea, ¡¡maldita sea!! - dije mientras nos volaban a tiros- Haré algo arriesgado - dijo John, mientras sacaba unas granadas de su bolsillo- ¿No pensaras...? - dijo José al mismo tiempo en que John tiraba una granada al centro del grupo Rifas, y al mismo tiempo en que recibía balas por todo el cuerpo.- ¡¡¡JOHN!!! - dijimos ambos

No quedaba ningún Rifa. Esa granada nos salvó a todos... pero sufrimos una importante pérdida. John fue un valiente, de esos de los que no hay.

- Maldición, ¡vienen más rifas, rápido, al Shamal! - nos informó Poppa- Pero... ¿Y John? - dije- ¡No hay tiempo, déjenlo ahí de una maldita vez! - dijo Poppa, al mismo tiempo en que entraba al jet.

No era momento de discutir. Entramos alShamal, y volvimos a Los Santos. Ese había sido uno de los peores días de mi vida. Ya me había vuelto tan amigo de John y de José... que no podía creer que no volvería ver más a John. Me di cuenta que todos pueden morir. Y siempre mueren los que no se lo merecen. Así paso el año, y 1987 nos abrió sus puertas. En los primeros días de Enero, pusimos una bomba en una base Rifa, lo que los exilió definitivamente a San Fierro. Al fín, todo había terminado. O eso creí yo. Ahora iríamos a por los Ballas, pero yo ya no quería. No más muertes. Hablé con Poppa, y me dijo que era un cobarde, y que tenía miedo. Ignoré todo lo que me dijo, y volvi a Grove Street. Me tiré al piso, tras la casa de Ryder. Él nunca iba allí, asique nadie me vería. Escuché a alguien hablando.

- He oido que los Rifas se fueron de la ciudad - dijo un Grove Street.- Si, y que los Vagos los reemplazaron - dijo otro de los Families- Esperemos que no se pongan a dispararnos a nosotros - dijo otro más- Ya lo han hecho - dijo la voz de Sweet- Little Devil y Big Devil fueron a investigar, y fueron atacados por un grupo de Vagos -

En ese momento me di cuenta de todo el mal que había hecho. No había pensado en las consecuencias de que los Vagos entraran en la ciudad. ¡A los Vagos no les importaba ninguna otra banda! Debía avisar a José... Poppa me había tendido una trampa, y yo le seguí el juego. Tomé mi Faggio, y me dirigí a Los Flores.

GTA SAN ANDREAS STORIESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora