Nosotras contra el mundo

Capítulo 27

Luz tuvo muchos problemas para dormir esa noche. ¡No podía dejar de pensar en lo que se escondía bajo los escalones de su apartamento! Afortunadamente, se las arregló para dormir un poco alrededor de la 1 de la madrugada después de estar en su teléfono e intentar distraerse. Luz se despertó el sábado por la mañana y miró la hora. Eran poco más de las 7 de la mañana. Luego recordó los eventos del día anterior.

"¡ O es verdad! ¡Necesito asegurarme de que esté bien ! " Luz exclamó levantándose de la cama.

Miró por la ventana y se sintió aliviada al ver que no estaba lloviendo, aunque el cielo todavía estaba lleno de nubes. Luz se puso un par de jeans porque se sentía incómoda al salir en pijama y rápidamente se puso los zapatos. Consideró despertar a Amity, pero decidió que era mejor dejar dormir a su novia. De todos modos, todavía era muy temprano.

Luz se dirigió a la puerta principal y la abrió con cuidado, no queriendo asustar a la criatura con el ruido. Asomó la cabeza por la puerta y vio que algo se movía por el rabillo del ojo. Ella miró hacia abajo para ver un pequeño animal encima de sus zapatos. El animal la miraba con grandes ojos amarillos. Parecía cauteloso, pero aparentemente lo suficientemente cómodo como para no querer abandonar su lugar.

Luz trató de no chillar demasiado fuerte, pero la sonrisa más grande se extendió por su rostro.

¡Es tan adorable! Pensó con regocijo.

Salió al porche, pero eso hizo que el animal decidiera que era hora de moverse. Se quitó los zapatos de Luz y bajó los escalones. El animal volvió a bajar los escalones y su espesa cola desapareció detrás de él. Luz bajó los escalones con cuidado y se arrodilló en el mismo lugar que tenía la noche anterior.

Dejó que sus rodillas cayeran sobre el barro mientras se inclinaba para mirar debajo de los escalones. "¡Oye, pequeño, puedes confiar en mí! No voy a herirte."

La luz del amanecer apenas alcanzaba para iluminar la oscuridad debajo de las escaleras, pero Luz pudo ver un par de ojos amarillos mirándola directamente. Decidió tumbar su cuerpo en el suelo, sin preocuparse por el barro y la suciedad en su ropa. Se mantuvo apoyada con un brazo mientras alcanzaba el otro hacia los ojos.

Los ojos parpadearon lentamente, y Luz de repente recordó algo que había leído en un artículo hace un tiempo. Con cuidado, Luz parpadeó lentamente hacia la criatura, esperando que el truco funcionara. Los ojos continuaron mirándola y Luz no pudo evitar sentirse un poco decepcionada. Ese artículo era una mierda, aparentemente.

Luz se volvió a levantar y miró la pequeña abertura debajo de los escalones. Se preguntó si la criatura vendría a ella si se sentaba y esperaba. La comida probablemente también lo haría funcionar mejor. Luz regresó a la casa, secándose los pies primero. Sacó algunos tostones sobrantes de la nevera y los calentó en el microondas. Salió con un plato de tostones y se sentó en los escalones del porche.

Pasaron unos minutos mientras Luz comía lentamente sus tostones mientras miraba hacia abajo cada pocos segundos. Luego, para su alivio, vio que la criatura aparecía a la vista desde los escalones. Luz se quedó callada, sin querer asustarla. La criatura la estudió durante unos momentos y Luz trató de averiguar qué tipo de animal podría ser.

El animal era increíblemente esponjoso, cubierto con un pelaje negro. Sin embargo, su hocico era de un marrón ceniciento y el pelaje alrededor de los ojos también era marrón. La raya subió hasta la parte superior del cráneo del animal y se ensanchó hasta convertirse en un gran parche de piel marrón. Allí fue donde Luz notó que al animal parecía que le faltaba una oreja. En el lado izquierdo de la cabeza del animal había una sola oreja negra que era puntiaguda y tenía un gran mechón de pelo en la punta. El vientre y la punta de la cola del animal también eran de color marrón.