fake me - sunaosa.

Capítulo Tercero: Primeras horas del lunes.

Escuchó el despertador pitar de forma persistente, un bufido se escapó de entre sus labios, propinó un golpe al aparato para apagarlo.

────Joder. ────soltó con resignación mientras se levantaba estirándose un poco.

Era claro que Atsumu odiaba levantarse temprano para ir a clases. Era algo que simplemente detestaba. Y más cuando su hermano no estaba cerca para hacer tonterías.

Los hermanos siempre habían sido esos gemelos que, aunque se pelearan ochenta veces por minuto, se querían y solían acompañarse en todo lo que hacían, además de tener ideas muy parecidas si no eran las mismas. En este caso se acusaban de ser copiones. Pero aún así, el aprecio entre ambos era notable y mutuo, además.
Sin embargo, todo había cambiado desde que Osamu había entrado en ese estado en el que se encontraba actualmente. No pensaba. Ni hacía tonterías. Era todo muy monótono, y, aunque intentara por todos los medios ayudar al ojigris, no parecía mejorar mucho.

El día anterior parecía estar mucho más expresivo. Pero, sabía con certeza que eso no tardaría en cambiar. Sí señor, su hermano volvería a estar en el mismo trance en cuestión de días. Era algo que ocurría repetidamente. Un día estaba " alegre ", y al siguiente era como si todo el mundo se le viniera encima. Un ciclo inalterable.

────...────la nostalgia lo había invadido, ni siquiera se había percatado de que las lágrimas habían empezado a caer por sus mejillas. Se tocó un poco la cara, y una sutil sonrisa se formó en sus labios. ────...A Samu no le gustaría verme triste.

¿Y acaso a él le gustaría ver a su hermano triste?, no, ¿verdad?, entonces, ¿por qué no se solucionaba así de fácil?, un simple " no quiero que estés triste ". Ojalá fuera así de fácil todo en la vida.

Era una pequeña cosa lo que creaba una diferencia abismal entre ambas situaciones.
Y, eso era que, Osamu ni siquiera se percataba de que su hermano no quería verlo triste.

Fin del Capítulo Tercero.