𝐌𝐢 𝐚𝐦𝐚𝐝𝐨 𝐞𝐬𝐩𝐨𝐬𝐨 𝐲 𝐲𝐨 - 𝐊𝐲𝐨𝐓𝐚𝐧

Familia

Tanjiro estaba acostado sobre el pasto, debajo de un gran árbol de cerezo. El viento soplaba suavemente, haciendo que las hojas y las flores de cerezo bailaran.

El sol estaba en su punto más alto, calentando el día perfectamente.

Tanjiro tenía sus ojos cerrados, disfrutando del calor y de la tranquilidad que había.

Los días anteriores habían sido un poco difíciles, física y mentalmente.

Por eso, Tanjiro disfrutaba cada momento libre que tenía para venir a este pequeño jardín, el cual su esposo le había mandado construir.

De pronto sintió como una sombra cubría el sol.

El joven abrió un ojo ligeramente a ver la figura que la cubría del sol.

Era su esposo...Kyojuro Rengoku.

-Te dolerá la cabeza si te quedas bajo el sol - Él le dijo.

Tanjiro volvió a cerrar su ojo, con una sonrisa sobre su rostro.

-...Es un hermoso día - murmuro.

El joven de cabello rojizo empezó a escuchar el ruido del pasto donde su esposo pisaba, luego escucho unos ruidos. El ex Kamado estaba por abrir sus ojos, pero de pronto sintió un peso sobre su estómago.

Era la cabeza de su esposo. Kyojuro se había acostado sobre él, con los ojos cerrados, disfrutando del relajante ambiente que su esposa disfrutaba hace unos minutos.

El joven de ojos rojos al principio se tensó un poco, debido al repentino peso, pero luego con una risita se relajó.

-...¿Largo día? - le pregunto mientras que con sus dedos acariciaba el largo cabello rubio de puntas rojas de su esposo.

-Mmhm...- El murmuro mientras pasaba un brazo por la cadera del joven para tener una mejor posición.

Tanjiro dio un pequeño suspiro mientras se sentaba, haciendo que la cabeza de su esposo reposara en su regazo, no que molestara a ninguno de los dos.

-...compre un poco de té, ¿quieres que te prepare un poco?- le pregunto mientras se inclinaba hacia enfrente para darle un dulce beso en la frente a Kyojuro.

-...Eso me gustaría - le dijo con un suspiro - pero...quedémonos así unos minutos.

-...con gusto - Tanjiro le dio otro beso en la frente, antes de acostarse nuevamente.

Pero esta vez, su esposo se movió, para poder acostarse a su lado, atrajo la cabeza de su pequeño esposo a su pecho.

-Mucho mejor...- El murmuro mientras alzaba la barbilla del chico para poder verlo a los ojos.

Tanjiro le sonrió con amor, para luego compartir un largo y dulce beso con su esposo.

-Tanjiro te amo...- le murmuro con otros pequeños besos.

El Kamado no dijo nada solo abrazo a su esposo - Oye... ¿alguna vez has pensado en agrandar nuestra familia?

Los ojos de Kyojuro se agrandaron en sorpresa. - ¿Q-que....?-

-Porque, bueno...tu hijo tiene cinco semanas en mi vientre - Tanjiro sonrió con un sonrojo en sus mejillas.

El hombre, de pronto sintió algo crecer en su pecho, lo mismo que sintió cuando Tanjiro acepto salir con él o cuando el chico vio al rojizo vestido blanco el día de su boda.

-T-Tanjiro yo....- Kyojuro titubeo un poco, antes de poner una mano ligeramente sobre el estómago del chico, en el que hace unos momentos había recargado su cabeza.

-Sorpresa....- el ex Kamado lo vio a los ojos con una bella sonrisa adornando su rostro.

Kyojuro sonrió dulcemente a su esposo antes de abrazarlo con fuerza y darle un beso profundo.

-No puedo creerlo...- le murmuró lleno de alegría y con los ojos húmedos conteniendo las lágrimas

Tanjiro volvió a sonreír antes de volver a abrazar a su esposo.

Y ese fue un día que el chico y su esposo jamás olvidarían...

...ya que era el inicio de una nueva vida.

Después de todo ahora era Tanjiro Rengoku y era el joven más feliz de todo el mundo.

Fin

Continuará...