Retirada

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Retirada

Isabella's POV

Estaba en la terraza sola mientras leía mi libreta de planes pensando en que hacer. Me dolía la nariz y el pómulo luego de que, después de muchos gritos y berrinches, Trent lograra sujetarme para que William me revisara los golpes. Había olvidado cuanto dolía romperse la nariz y tener un pómulo morado. Arrugué la nariz pensando y seguí apuntando posibles bromas.

1. Mojarla con la manguera

2. Cambiar las sillas y flores

3. Cambiar el sabor del pastel

Reí por mi mente perversa y apunte los últimos detalles para luego guardar mi libreta. Vi el cielo oscuro y me di cuenta de que ya era demasiado tarde. Fennix y Trent se habían ido hace unas horas y yo no podía dormir, por lo que baje a relajarme y pensar. Quería destruir y vengarme pero no encontraba algo realmente bueno como para dañarlos un poco o molestarlos lo suficiente. Una idea llego a mi cabeza y sonreí de oreja a oreja recordando los planes de Hunter, Leith y míos en casos como estos. Corrí adentro de la casa tratando de no hacer ruido, y corrí como alma que lleva al diablo por el pasillo hacia la habitación. Busque en el escritorio hasta que al fin encontré la carpeta con los planes. Sonreí sentándome en la cama con la carpeta en mi regazo y la abrí con una sonrisa de oreja a oreja.

"Planes en caso de emergencia"

"Peligros:

•Acabar castigado de por vida
•Afectar seriamente a la víctima
•Lastimar lo más preciado

Plan:

1. Dañar todo a tu paso
2. Nunca dejarse manipular ni ser
predecible
3. Utilizar las armas correctas

Propósito:

No dejarse herir"

Sonreí ya teniendo una idea del plan. Destruiría todo a mi paso aunque eso implicara estar castigada de por vida. Empezaría por la boda y luego, vería como vengarme. Guarde la carpeta en el cajón con llave donde guardaba todas las cosas importantes, cuando la puerta se abrió. Me giré indiferente, y al ver que era Daniel, bufé rodando los ojos y tomando mi mochila con algunas cosas. Camine hasta la puerta ignorándolo, pero el tomó mi brazo cubriéndome la boca y levantándome del suelo mientras yo forcejeaba. Salió del cuarto todavía sujetándome y cerró la puerta llevándome así por todo el pasillo hasta las escaleras. Trate de liberarme pero me era imposible. Vi como habían unos chicos más altos que nosotros afuera al lado de una camioneta negra y ahí si que me asuste. Uno de los grandotes caminó hacia nosotros y amarró mis manos con una soga y cubrió mi boca con una mordaza. Daniel me entró a la camioneta bruscamente, y luego de el subir, arrancaron a toda velocidad. La furia corría por mis venas y también estaba confundida, o sea, no todos los días te secuestra tu ex-novio sin ninguna razón. Me moví tratando de soltarme pero Daniel me envió una mirada de pocos amigos la cual le devolví.

-Tal vez no sepas porque estas aquí pero es muy sencillo, te traje porque resolveremos algunos asuntos-dijo tranquilamente y yo lo mire incrédula y furiosa

-Eshe shiun moltidnd-dije tratando de que me entendiera cuando le dije que es un maldito

-Preciosa, quieras o no, vendrás conmigo y más te vale comportarte-me advirtió y yo bufe

<<Ojalá se ahogue o lo atropellen>>-pensé y sonreí macabramente por el pensamiento

10 minutos después....

-¡AND WE DANCE ALL NIGHT TO THE BEST SONG EVER!-gritaron a todo pulmón los chicos, incluyendo a Daniel, y yo me quería tirar de la camioneta

Desde mi último pensamiento psicópata, todos han estado cantando canciones de One Direction. No me malinterpreten, amo One Direction, pero escuchar a unos chicos cantar con si fuera una vaca pariendo hace que quieras suicidarte. Bufe por enésima vez en la noche y ya quería bajarme. Luego de unos minutos, que parecieron horas, al fin llegamos al supuesto lugar y todos pararon de cantar para volver a su fase "Soy un chico malo así que no te metas conmigo" la cual ya sabia que no era así. Mi puerta fue abierta y un grandulón me sacó como saco de papas haciéndome rodar los ojos. Cuando al fin toque el suelo, grandote, me saco las sogas de las manos y soltó la mordaza en mi boca haciéndome suspirar de alivio.

Volví por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora