Laurie en el presente

Extra 2

Laurie veía desde su ventana a Jo, quien se encontraba en el ático, escribiendo, como siempre. Pero estos días se había empeñado en dedicarle aún más tiempo a la escritura, faltaba menos de una semana para el concurso de escritura "Writtober 2021". Ella y Laurie habían quedado de salir esa tarde a escoger juntos los disfraces que usarían el domingo para el Trick or Treat.

"Lo siento Teddy, no podré salir esta tarde, faltan 5 días con 7 horas para que entregue el relato. Meg escogerá por mí mi disfraz, será de la Reina Jadis, suerte al escoger el tuyo".

Ese había sido el corto mensaje de texto con el que Jo le había roto el corazón a Laurie.

Y la razón por la cual Laurie tenía que conformarse con disfrutar de su magia como lo hacía antes de conocerla, desde la ventana.

Para Jo, ese concurso no sólo era el hecho que querer ganar el premio, que consistía en tomar todos los libros que quisieras en el lapso de quince minutos, sino probarse a sí misma si estaba hecha para ser una escritora prodigiosa.

Jo, a su corta edad, tenía una inteligencia verbal impresionante, ya se lo habían dicho sus maestros en más de una ocasión, pero ella quería que una escritora, de verdad, se lo confirmara... o desmintiera.

Además estaba el simple hecho de que quería conocer personalmente a Sally King y Lauren Oliver, quería tener la oportunidad de decirle cuanto las admiraba, cuanto la inspiraban y que algún día quería ser como ellas.

También esperaba que alguna de ellas tuviera tiempo de intercambiar algunas palabras con ella, claro está.

Pero para eso, tenía que ganar, sólo el primer lugar tendría la oportunidad de desayunar al día siguiente con las reconocidas autoras, si bien el segundo y tercer lugar también ganarían diez y cinco minutos de correr por la librería más grande de la cuidad tomando libros gratis, lo que Jo quería era tener la oportunidad de platicar al menos con una de ellas.

Y esa era la razón por la cual Jo había dedicado los últimos días con mayor esfuerzo a perfeccionar su relato, no importaba estar encerrada la mayor parte del día en el ático, no importaba tener que comer frente al computador, no importaba dormir menos de lo normal, no importaba no haber convivido con su familia y Laurie estos días, no importaba el sacrificio, bien lo valía, tenía que ganar.

Jo puso toda su alma y mente en la escritura de ese relato, ahora debía esperar al domingo, el día que lo entregaría, y horas después darían el resultado.