𝚚𝚞𝚒𝚗𝚌𝚎

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Los días pasaron, convirtiéndose en meses, Hoseok se las había arreglado todo este tiempo para pasar desapercibido, nada relevante había pasado después de eso

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Los días pasaron, convirtiéndose en meses, Hoseok se las había arreglado todo este tiempo para pasar desapercibido, nada relevante había pasado después de eso.

Estaba por concluir sus estudios de secundaria, por fin saldría de ahí, y el hubiera querido que su último año fuese magnífico pero había sido una catástrofe.

Se había alejado de su mejor amigo y eso no le agradaba en absoluto, lo extrañaba en demasía, pero no entendía la insistencia de pasar tiempo con su tan querido novio Jeon Jungkook.

Ahora tenía que asistir a la ceremonia de su escuela, aunque Hoseok no sabía porque tanto espectáculo para solo entregar una hoja de papel.

Así que ahora se encontraba en el auditorio de la escuela buscando su asiento, que habían sido repartidos por apellidos, por un momento odio ser un Jung, pues de todo el alumnado porque Jeon Jungkook estaría sentado a su lado. Hoseok respiro hondo, tenía que actuar desinteresado, que esto no le afectara.

— Hola. — dijo un muy incómodo Jungkook.

— Si te es tan incomodo, no saludes. — sonando muy tosco y manteniendo la postura siempre al frente sin titubear, Hoseok se felicitó mentalmente por su fachada.

— Y-Yo... Estoy tratando de al menos poder estar juntos... en el mismo espacio.

— Entonces debería tener cuidado y no bajar la guardia, para que no saltes en mi en cualquier momento. — siendo arisco y sarcástico, no iba para nada en Hoseok.

— No tienes porque ser así...

Hoseok rió entre dientes.— ¿Ser así? ¿Siquiera sabes cómo me siento? No puedo pasar el tiempo sin que la culpa me carcoma.

Debí decirle pensó Hoseok.

— Tienes razón fui egoísta... lo soy...

Debí terminar con el pensó Jungkook.

Todo se sintió como un espejo roto en demasiadas piezas, que a cada minuto caía un pedazo de cristal esparciéndose en el suelo, y a cada paso se incrustaban pedazos de cristal, hiriendo sus pies descalzos para derramar gotas de sangre porque absolutamente todo se iba a la mierda.

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𝑻𝒉𝒓𝒆𝒆; 𝒋𝒖𝒏𝒈𝒉𝒐𝒑𝒆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora