Encuentros en el Callejon Diagon

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Ya había pasado un tiempo desde mi cumpleaños y desde la pelea con mis padres ni siquiera los había visto, se levantaban muy temprano para ir a su trabajo y volvían muy tarde, yo suponía que me estaban evitando. Sumado a eso, le había mandado una carta a mi hermano, contándole todo lo que había sucedido y este me respondió con una carta, bastante molesto, donde me reprendía porque según el, "había sido muy grosera con mis padres", yo me sentí bastante decepcionada porque al menos esperaba tener su apoyo, pero después recordé que este también había preferido su trabajo antes que festejar me cumpleaños y entendí que era obvio que este se pondría de parte de mis padres. Pero el tema que no había dejado de rondar en mi cabeza durante esos días, era la misión que tendría que cumplir comenzando mi año escolar en Hogwarts, proteger al famoso "niño que vivió". Yo dudaba que pudiera lograrlo, habían muchos factores en contra, como las probabilidades de quedar en la misma casa que el, "¿Como nos haríamos amigos si quedábamos en diferentes casas?" Y si quedábamos en la misma casa, ni siquiera sabia si iba a lograr hacerme su amiga, yo no era muy buena socialmente hablando, en realidad, nunca había tenido amigos, ya que hasta ese momento, toda mi educación había sido en casa y con los únicos niños que había convivido, habían sido mi hermano y mis primos. Ya para entonces, comenzaba a dudar de que hubiera sido una buena idea aceptar la misión que me había dado mi bisabuelo.
Estaba acostada en mi cama pensando en todo esto cuando alguien tocó a mi puerta.

-¡Adelante! *Dije mientras me incorporaba*

-Disculpe las molestias señorita Arabella, espero que este teniendo un esplendido día.

-No te preocupes Emmy, dime, ¿que se te ofrece?
*Conteste cortésmente*

-Su padre me pidió que le entregara esto. *Dijo mientras me entregaba una pequeña llave plateada* Es para su cámara de Gringotts.

-Ya veo. *Conteste mientras examinaba la llave*

De pronto un repentino sentimiento de preocupación me invadió. Me había olvidado de comprar mi material escolar para Hogwarts, pero entonces me tranquilicé después de mirar mi calendario, apenas era el día 31 de Julio, aun faltaba un mes para entrar a clases, pero en ese momento tenía la fuerte sensación de que ese día, tenía que ir al callejón Diagon, para comprar mis útiles.

-Emmy, ¿tienes muchos deberes que hacer hoy?

-Solo la limpieza habitual, señorita.

-Muy bien, dile a Vell y a Nix que se repartan tus tareas entre ellas y tu me acompañarás al callejon Diagon para comprar mi material del colegio. *Emmy pareció emocionarse pero trato de disimularlo*

Las elfinas de mi familia no solían salir de la mansión muy a menudo, solo podían hacerlo si tenían una tarea que hacer.

-Si Señorita. *Dijo con obediencia*

-Bien, me daré un baño, por favor avísale al chofer y prepárate.

Después de darme una rápida ducha, ya que era un día muy caluroso; me puse un conjunto, que consistía en una falda y un saco color rosa, el saco tenía botones de perlas y mangas tipo princesa, y la falda me llegaba arriba de la rodilla; de zapatos, utilize unas Mary Janes blancas con medias blancas que me llegaban arriba de los tobillos; me peine con una coleta baja y me puse una boina francesa blanca.
El camino duro dos horas y cuando estábamos afuera del Caldero Chorreante Emmy se volvió invisible, para que no la vieran los muggles.

¿Protección o amor? (Harry Potter) Pt. 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora