¡Mi querido Oon!

Oon VIII

"Hoy tenemos el placer de abrir la exhibición del artista Oon. ¡Déjenme presentarles a la estrella de la exhibición de hoy, Miss Oon!"

Una vez que la mujer lo anunció, hubo un estruendo de aplausos que lleno todo el salón de la exhibición. Una delgada figura con un largo sombrero ondeado, vestía un vestido largo de color rojo cortado del lado derecho emparejado con una simple cadena de oro con un pendiente de media luna y combinaba con unos aretes dorados, también un tacón dorado ligeramente alto caminó hacia ella y tomó el micrófono.

"Gracias, Pritha."

La dulce voz atrajo la atención de todos desde el atuendo hasta su rostro.

"Primero que todo muchas gracias a todos por estar presentes hoy. También me gustaría agradecer a P'Knott por darme la oportunidad de exhibir mis trabajos. Siempre me han preguntado cuál es el secreto de mi arte. Cómo puedo pintar muy bien y cómo expreso mis emociones. En realidad, hay un hombre detrás de todo esto. Todas las emociones que gotean a través de mis pinturas. No es nadie más que mi hijo. ¡Rome!"

Knott caminó para acercarse a Arthit con un pequeño niño de 2 años sosteniendo su mano. El niño inmediatamente se embobó después de ver a su madre y saltó inmediatamente hacía él y agarró su mano. Arthit tomó al niño de Knott y le dio un pequeño piquito en sus regordetes cachetitos.

La multitud estaba asombrada por la escena frente a ellos. Knot incluso se le salió unas cuantas lágrimas. Le hacía feliz ver cuánto ha logrado en estos dos años su amor. Después de todo el dolor por el que pasó.

Las imágenes de esa noche aún siguen frescas en su mente, donde una vez recibió una llamada de Arthit y corrió hacia su casa. Luchó contras los guardias, pero gracias a la ayuda del señor Suthiluck se las arregló para llegar hacia Arthit a tiempo.

Entonces él llevó a un Arthit inconsciente y desangrado al hospital y le informó al señor Suthiluck. De verdad quería matar a ese cabrón, pero él sabía que la venganza no era importante ahora. Necesitaba estar ahí para Arthit.

Después de pasar por todo ese infierno, el doctor finalmente se acercó y le dijo que ellos exitosamente salvaron al bebé y al portador. Eso fue cuando Knott finalmente pudo exhalar aliviado.

Después de que Arthit estuviera en el hospital por un mes. Knott estuvo a su lado sin fallarle. El demonio envió los papeles de divorcio declarando que Arthit lo engañó. Arthit firmó los papeles y finalmente estuvo libre de esa tortura.

El señor Suthiluck siempre lo visitaba de vez en cuando. Incluso le insistió a Arthit que se hiciera una prueba de ADN y que lo contrademandara. Pero Arthit no cedió. El señor Suthiluck incluso le rogó a Arthit que mantuviera la herencia, pero su esposa y su hijo también decidieron llevar el caso a la corte. Y entonces terminó por divorciarse de su esposa, desheredando a su hijo y donando toda su riqueza a la caridad bajo el nombre de su nieto.

Si, el hombre creía que el niño era parte de la familia Suthiluck incluso si Arthit lo negara. Una vez que Arthit volviera del hospital se quedaría con Knott. Cada noche Arthit tendría pesadilla de ese particular día donde casi pierde a su preciado. Knott hizo lo mejor que pudo para tranquilizar a Arthit y ellos incluso contrataron a un enfermero llamado Tew para estar con Arthit todo el tiempo.

Una vez que Arthit dio a luz, todo cambió. El paquete de alegría obligó a Arthit a pintar de nuevo. Hizo todo para asegurarse de que su hijo tuviera la mejor de las vidas.

Mientras todo cambiaba para bien en la vida de Arthit, de alguna manera, Knott se enamoró de Tew. La manera en que el enfermero cuidaba de su amor. Tew también los ayuda en la casa cada vez que está cerca. Arthit instó a Knott de que le diera una oportunidad y nunca pensó de que estaría felizmente por un año ya. Ahora están esperando adoptar también a un hermoso niño.

La exhibición fue un éxito. Habría una gran meta para la carrera de Arthit. Empacó todo, agarró a su hijo y fue hacia su auto. Una vez que estaba caminando por el estacionamiento, su hijo se tambaleó cerca de un hombre.

Arthit levantó a su hijo y enfrentó al único hombre que nunca deseó ver otra vez en su vida. No se molestó en saber ninguna actualización sobre el hombre de parte de su suegro que aún lo seguía visitando hasta el día de hoy.

"¡O-Oon!"

Escuchar esa voz después de dos años no le hizo bien. El corazón de Arthit empezó a arder del dolor y de la miseria. Todo pasó por su mente como una cinta de película antigua.

El hombre se veía en mal estado, como si no hubiera dormido en estos dos años y obviamente está más delgado que nunca. Su camisa estaba arrugada y su cabello estaba desaliñado, Arthit casi no reconoce a su ex esposo.

La única cosa que pasó por su mente era que necesitaba proteger a su bebé. Inmediatamente sostuvo a su hijo con más fuerza y empezó a caminar más rápido hacia su auto. Su corazón empezó a palpitar. El hombre agarró su muñeca y trató de empujarlo más cerca.

"¡Déjame en paz!"

Gritó a todo pulmón. Las lágrimas que había guardado por dos años empezaron a golpear su rostro. Su hijo empezó a sollozar al ver la condición de su mamá.

"¡Oon! Lo siento mucho. Me arrepiento de todo lo que hice. Lo siento por dejarte en un momento tan crucial. Solo quiero de vuelta a ti y a nuestro hijo. Ya me castigaste lo suficiente. ¡Por favor!"

Arthit no podía creer lo que escuchaba. No estaba interesado en recibir una disculpa de parte de Kongpop después de todo lo que pasó. Abrió la puerta de su auto, dejó a su hijo adentro y se paró enfrente de este como si estuviera protegiendo algo preciado.

"Nunca regresaré a ti, Khun Suthiluck. Te puedes incluso arrodillar y rogar, pero esa es la única cosa que nunca pasará. Y él es mi hijo. ¡Mío! No tienes ningún derecho sobre él. ¿No sabías ya que yo te engañé y di a luz a un hijo de otro tipo? ¿Por qué el repentino cambio? ¿Acaso ya no te satisfacen las prostitutas? Estoy seguro que si esa es la razón tu nunca te follaras a este flácido trasero."

Kongpop estaba sorprendido. No podía murmurar ni una palabra. Estaba sorprendido porque su Arthit estaba escupiendo palabras de odio de su boca. Nunca había visto al menor alzar la voz. Pero el sabía que todo era su culpa y está sufriendo mucho por los pecados que cometió contra el menor.

Perdió a su mamá, a su riqueza y lo más importante, a su dulce y amorosa esposa. Todo lo que poseía fue arrebatado de él. Estaba totalmente esclavizado por el alcohol hasta que su padre habló con él. Su padre le pidió que le pidiera perdón al menor. Esa es la única manera de liberarse de los pecados que ha cometido.

"¡Oon! Siempre lo intenté. Intente arrepentirme. Te esperaré hasta el día que me perdones."

"Ese día nunca pasara incluso si es mi último día en la tierra."

Con eso dicho, el menor se fue con su bebé sin mirar atrás.

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