"Hablando"
' Pensando '
"Demon Talking"
Descargo de responsabilidad: no soy dueño de Naruto.
Capítulo 7: Las olas se estrellan
Takumi el Taki nin entró en la mansión del hombre más rico de este país. Mientras lo escoltaban por los pasillos, ignoró las miradas de los matones y los gritos de las mujeres derrotadas. El aire apestaba a alcohol y todo el edificio estaba empapado de vileza.
Al cruzar las ornamentadas puertas dobles, se encontró cara a cara con un hombre de baja estatura con el pelo demasiado grande para su cabeza. Los ojos pequeños y redondos detrás de los pequeños lentes redondos escudriñaron a Takumi antes de que el hombre detrás del escritorio sonriera con complicidad. Inclinándose ante su potencial socio comercial, el ninja desaparecido esperó a que lo abordaran.
"Bienvenido a mi humilde morada. Espero que te hayan tratado bien. ¿Qué puedo hacer por ti?"
Takumi levantó la mirada. "Gato-san-" El hombre que estaba sentado levantó una ceja. "-Me gustaría ofrecerte mis servicios, no como asalariado sino como socio".
El hombre pequeño se inclinó hacia delante y apoyó la barbilla sobre las manos juntas. "¿Oh? ¿Cuál es tu propuesta?"
"Se dice en la calle que actualmente estás buscando a cierto constructor de puentes del que cuidar y que este constructor de puentes está bajo el cuidado de Konoha nin. Esa escoria de hojas mató a mis hermanos cuando nos ocupábamos de nuestros propios asuntos". Su mano se apretó en un puño. "Quiero venganza ". Exclamó la palabra con tanta sed de sangre como pudo. El Taki nin permitió que se hundiera. "Estoy ofreciendo mis habilidades como shinobi. Me ocuparé de cualquier cabo suelto que puedas tener sin paga siempre y cuando brindes la oportunidad de mi venganza". Se relajó un poco y juzgó la reacción de Gato.
El empresario de Gato no podía dejar pasar una oportunidad tan grande, pero algo parecía mal. No todos los días un ninja desaparecido de rango A ofrecía sus servicios de forma gratuita.
"¿Cuál es el truco?"
"Es realmente simple. Quiero tu palabra de que no me considerarás un cabo suelto después. Me vengaré. Tus problemas están resueltos. Ambos olvidamos lo que sucedió y no intentamos apuñalarnos por la espalda. "
Gato reflexionó sobre esto por un momento. Todos sabían que un empresario honra su palabra, pero Gato no era solo un empresario.
"Tienes un trato".
Shikamaru supo que algo estaba pasando en el momento en que vio al anciano borracho. Sin embargo, no le dio mucha importancia hasta que llegaron a la casa del constructor del puente después de ser atacados no por uno, ni dos, sino tres ninjas perdidos. Cómo Ino había convencido a Asuma de continuar la misión estaba más allá de sus conocimientos. ¿A quién le importaba que el nombre de Konoha y los registros de su misión se empañaran si rechazaban la misión? Aparentemente, Ino y Asuma lo hicieron.
Ahora, el usuario de la sombra estaba sentado, haciendo todo lo posible por no parecer demasiado aburrido, mientras terminaban su cena. Habían pasado unos días desde su encuentro con Zabuza.
