Desearía que Fueras mi Príncipe Disney

12. Once Sobre Diez

N/A: Ligero contenido para adultos.

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"¿Krist?" Krist miró hacia abajo para ver a su novio agarrándose con incertidumbre al dobladillo de su abrigo. A veces era tan adorable que era difícil recordar que se suponía que él era el lindo.

"¿Sí P'Sing?"

"Hemos estado caminando por todas partes. Me arrastraste a esa pizzería y luego a Central Park. Estoy cansado" Singto miró hacia arriba debajo de sus pestañas, sacando los labios levemente, "¿No podemos ir a descansar a mi habitación de hotel? "

Krist miró con recelo a su compañero, la expresión parecía demasiado inocente para su travieso león, "Tú...tú..."

"Por favor, Kitttt ¿naaaaaa?" Singto abrió aún más los ojos y miró suplicante a su novio.

"¡P' Sing! ¡Tú...tú... perro caliente!"

"Pero P' extrañó a su Kit naa khaaab" se quejó Singto, sabiendo exactamente los botones que presionar,

"Yo...vine aquí para hacer turismo contigo y...¡y tengo desfase de horario!" Krist protestó,

"No escuché un no en ninguna parte" Singto sonrió,

"Yo ..." Krist suspiró rindiéndose, ¿por qué luchar cuando él también lo deseaba desesperadamente? Al menos P'Oon y P'Kong no habían fingido querer hacer turismo.

"¿Kit?"

"Bien" Krist apretó su agarre en la mano que tiraba, "Vamos"

Kit gimió cuando tres dedos largos entraron y salieron profundamente de su agujero, el ritmo dolorosamente lento para su cuerpo caliente y desesperado. Se obligó a no revolcarse en la cama, sabiendo que solo haría que su amante lo torturara más.

"P' Sing .."

"Silencio bebé, deja que P' te prepare adecuadamente" Singto aterrizó otro fuerte golpe en las pálidas nalgas, haciendo que el más joven gimiera más fuerte de placer. A su Kit le gusta el placer mezclado con un poco de dolor.

"P...pero Kit ha sido tan bueno" lloriqueó Kit, con los ojos cerrados y babeando un poco mientras su Singto continuaba con el placentero asalto a su cuerpo.

Singto gruñó en voz baja y empujó a su novio hacia abajo contra la cama, dejando pequeños besos rápidos en las tentadoras mejillas. "¿Lo hiciste? ¿No corriste aquí sin avisar a P'Sing primero?"

"Pero Kit extrañó a su Tuan" gritó Kit, realmente necesitaba P'Sing dentro de él ahora mismo. El comenzaba a acercarlo más y más al borde. Ni siquiera podía comprender cuándo Singto los había arrastrado a ambos arriba y había logrado desnudarlos en una ráfaga de movimientos desesperados. Lo siguiente que registró vagamente fue la sonrisa diabólica de su P'Sing y que le dio la vuelta a cuatro patas mientras unos dedos traviesos y resbaladizos se deslizaban dentro de él.

"Solo un poquito más bebé" murmuró Singto, casi jadeando, "Ten paciencia, ¿eh? P' se asegurará de recompensarte bien"

"Pe...pero..." maulló Krist cuando una fuerte bofetada aterrizó en sus mejillas ya enrojecidas, la acción solo lo hizo derramar líquido preseminal por todo su miembro lloroso.

"Shh baby, deja que te trate bien"

Singto suspiró felizmente mientras su novio se acurrucaba en su cuello, silenciosos ronroneos de satisfacción escapando mientras se acomodaba más. Todavía les quedaban un par de horas antes de que tuvieran que reunirse con sus tíos, ya que habían retrasado la cena para tomar un par de copas en su suite.