6. El otro lado (Parte 2)

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6. El otro lado (Parte 2)

Cuando ya me encuentro en frente de la puerta de mi habitación y de mi esposo, veo que está entreabierta así que estiro mi mano y camino hasta que la puerta cede y se abre llamando la atención de Jorge.

Inconscientemente pongo mis brazos en jarras y demando: — Jorge, tenemos que hablar.

Baja lentamente el periódico que estaba leyendo sentado en su sillón especial y luego me mira expectante, o tal vez no tanto. Me mira como diciendo "¿Y ahora qué pasó?" Porque esta definitivamente no es la primera vez que le planteo el tema de Cheer, pero al parecer él no está de acuerdo conmigo y quiere que me quede tranquila como si nada mientras mi única hija camina hacia un agujero negro sin salida.

—Lo sé. Hasta aquí se escuchaban tus gritos. Si te soy sincero admiro la capacidad de Cheer para seguir metida en su universo mientras gritas de esa manera tan particular que tienes —. Responde para después sonreír negando con la cabeza como si la situación fuera chistosa.

—No es un motivo de gracia, mi amor. Esto es serio. Hoy a Cheer le entregaron 3 exámenes y reprobó todos. ¿No crees que deberíamos hacer algo?

Suspiró y me miró con ojos cansados, se tomó el puente de la nariz en lo que parecía un intento por reunir paciencia.

— ¿Qué propones hacer? — Dijo entrelazando los dedos en su regazo—, ¿Mandarla a un psiquiátrico o a un centro para adolescentes mala conducta? La van a hacer papilla, Cinthia. ¿Acaso ya olvidaste lo que dijo el psiquiatra? Ella no va a cambiar, su cerebro funciona así, su mente es así. ¿Le compramos una nuevo, o qué?

Me enojó y llenó de impotencia el tono con el que lo dijo, como si no importara, como si fuera un juego que nuestra hija no estaba viviendo su adolescencia como se debe, que estuviera todo el día acostada en su cuarto y que si le decíamos que hiciera algo, iba caminando como si fuera un robot en piloto automático a cumplir con la orden. Que no socializara con sus compañeros, que no saliera a fiestas, no sintiera atracción por ningún chico. Y como si fuera poco que ya exploté con mi hija abajo, mi esposo ahora decide actuar como si no pasara nada.

—No te estoy pidiendo nada del otro mundo, Jorge — sigo, tomando respiraciones pausadas para tranquilizarme, yo soy la madre aquí y no puedo perder el control —. Solo que hagas algo, o que al menos me dejes hacer algo por nuestra hija, debe haber alguna manera de que ella pueda sobrepasar su estado, debe haber alguna forma de...

— ¡No la hay, Cinthia, por Dios!— me corta levantándose del sillón de un salto y logrando sobresaltarme —. ¿Cuándo vas a entenderlo? ¡Ella es así, nació así y no podemos cambiarla! Es nuestra hija, Cinthia, no un juguete averiado que podemos arreglar — me dijo a tono de consejo —. Así que acéptalo, ámala y vive con eso — finalizó para luego volver a tomar el periódico y sentarse en el sillón.

Bien. ¿El señor no quiere hacer nada por salvar la vida de nuestra hija? Pues yo sí, no voy a seguir permitiendo que todo siga como que no pasa nada y mucho menos voy a tolerar que Jorge me esté diciendo que me quede tranquila en estos momentos.

Salgo de la habitación hecha una furia y bajo las escaleras de dos en dos, me dirijo a la cocina, abro el tercer cajón a la izquierda, saco todos los cubiertos, los pongo en la mesa y levanto el fondo falso que estuvo allí desde el inicio de todo.

Empiezo a buscar entre todos los anuncios, documentos y papeles, encuentro una en específico que ha estado rondando por mi cabeza desde ya hace rato, lo contemplo.

<La cabaña espiritual y de la sanación.>

En este espacio reconfortante para los padres, les enseñamos a sus hijos a tomar un control estricto en sus vidas y los guiamos siempre de la mano de nuestro Señor.

Leo las líneas decidida a terminar con toda esta angustia de una vez por todas y marco el número que está escrito en la cara trasera de la tarjeta.


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¡Hi guyyys!

HEY,,,, TAMO DE VUELTAAA

JAKSJAJJA perdón. Entonceeees,,,,

¿Qué tal la señora, ah? ¿Qué creen que pase en el siguiente capítulo? Pues yo me imagino que ustedes ya se lo imaginan, - guiño, guiño- El siguiente es el último y después viene el epílogo my babeees.

Personalmente, siento que el epílogo va a ser lo mejor de todo. 

Ah, y quiero aclarar una cosita, el capítulo 6 tiene 2 partes, y narra lo mismo que el cap 5 pero desde el punto de la madre de Cheer, Entonces... ¿Por qué el capítulo 5 es corto y con una parte como todos y el 6 tiene dos partes? Es simple, porque para Cheer, pasa el tiempo demasiado diferente que para las demás personas, y estos capítulos tuvieron como objetivo mostrar otros puntos de vista.

¿Qué les pareció el caaaap? Cuéntenme todo.

Bueno, para terminar esta nota inusualmente larga quiero compartir con ustedes los logros que ha tenido esta historia y que me ponen muy feliz.

El 25/11/20 "Yo no soy la loca" Llegó a estar en el puesto #10 categoría Delirios.

El 02/12/20 En el puesto #6

El 04/12/20 En el puesto #4

Y hoy, 05/12/20 ESTA HISTORIA LLEGÓ A ESTAR EN EL PUESTO #2 DE LA CATEGORÍA DELIRIOS.

AAAAAAAAAAAAA

Dios estamos tan cerquita del puesto #1 que no me importa si no llegamos, esto para mí ya es un logro asombroso.

Me despido.

Besitos de flan de dulce de leche.

-Carmen S.


Yo no soy la loca [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora