Strangers in the night

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JANE:

- Puede que tenga una pequeñita sorpresa para ti - la verdad que estaba intrigado, no se que podía esperarme de ella. Muchas veces consigo leerla y entenderla sin ninguna complicación pero había otras veces que era casi imposible - Si si si, se que estas intrigado, pero primero nos terminamos el helado - ni me acordaba del helado que sujetaban mis manos. Mis ojos y mi mente solo podían situarse en la preciosa cara de ella y en lo cerca que estaban.

- Vale pero que sepas que no me gustas las sorpresas, aunque tengo que admitir que las tuyas son mejores que otras - todas las sorpresas que me había dado eran verdaderas sorpresas, de esas que no te esperas y te hacen más feliz de lo normal. Nos separamos aunque mi brazo derecho rodeo sus hombros para tenerla más cerca a mi, que era lo único que necesitaba. Se sentía muy bien estar con ella.
Cuando nos acabamos los helados le pregunta cual era la sorpresa. A lo que ella respondió sacando unas pequeñas toallas de un bolso que traía y se empezó a quitar la ropa. No entendía muy bien lo que estaba ocurriendo y no quería que mi cabeza me hiciese una mal jugada. Así que moví un poco la cabeza intentando sacarme esos pensamiento y cuando volví a enfocar la mirada me encontré a Lisbon en bikini. Salió corriendo al agua, era tan perfecta.

- Que? Te vas a quedar ahí parado o vas a meterte conmigo?! - me dijo ya desde la lejanía.

- No traje bañador!! -

- Que más da!! Tienes calzoncillos hahahahah - se rió a carcajadas. La sorpresa era reírse de mi por no traer traje de baño, pero no podía perderme esta oportunidad, ademas hacía muchísimo calor y el mar era , después de estar con Lisbon, lo que más me apetecía en ese momento . Me empecé a quitar la ropa y cuando estuve en ropa interior salí corriendo hacía las olas. Lisbon ya se había sumergido en alguna ola y yo entre de cabeza para acompañarla. El agua estaba a la temperatura perfecta y ella , ella estaba reluciente, feliz y hermosa. Siempre lo estaba.
Nos abrazábamos y jugábamos juntos con las olas. La cogía por la cintura y la tiraba hacía las olas y ella intentaba sumergir mi cabeza en el mar. Las risas no paraban de sonar, las bromas no paraban de repetirse y solo éramos ella y yo. El tiempo se paso volando y empezó la puesta de sol y nosotros seguíamos en el mar. La cogí por la cintura y le di un beso en la nuca.

- Gracias por hacerme tan feliz - en el día de hoy, y sobre todo esta tarde en la playa,nuestra relación se había empezado a consolidar y cada vez nos empezábamos a comportar más como una pareja .

- Gracias a ti por convertirme en todo lo que soy. Ha sido un día increíble y no podía acabar mejor que nosotros dos, en el mar viendo una de las mejores puestas de sol que visto nunca - entonces de dio la vuelta y quedó de frente a mi - Sabes que? - sabía que no necesitaba respuesta y ademas mis ojos solo podían fijarse en los suyos y en observar cada movimiento de si rostro - Yo tampoco me imagino despertarme sin saber que te voy a ver y que tu no vas a estar a mi lado - el sol ya se estaba acabando de poner y yo solo podía prestarle atención a ella. La besé, claro que la besé. La necesitaba en mi vida y ese momento, ese momento era el perfecto.

- Teresa, te quiero muchísimo - a lo que ella respondió con un beso intenso que acabó con uno de esos abrazos en el atardecer que ya nos empezaban a caracterizar. Seguía teniéndola entre mis brazos y ella a mi.

- No crees que deberiamos irnos ya? Tendremos que ducharnos y el vuelo no es muy tarde tampoco - me pregunto ella con un poco de preocupación en su rostro. La verdad que no sabiamos ni que hora era. Dejamos todo al entrara en el agua y con tanta diversion y amor no nos preguntamos ni que hora era. Podía ser que fuese muy tarde, pero en todo caso nos iríamos sin ducharnos y cuando llegásemos ya.... bueno ya veríamos.

- Vale si claro, espera - y salí corriendo del agua. Esperé a que saliese ella para llevarle la toalla y taparla con ella.

- Eres más romántico de lo que esperaba Patrick Jane - no pude evitar sonreír y darle un pequeño beso en la frente.

Momentos... THE MENTALISTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora