el gemelo de naruto sasuke y tu (yaoi)

capítulo 2

____ esperaba a su hermano, quien estaba tomándose una foto para su registro, pero a su parecer se estaba demorando demasiado. Intentaba no pensar en el día de ayer, pero simplemente no se puede sacar de la cabeza su conversación con Iruka.

Flashback:

—Iruka-sensei, me dijo que me iba a explicar algunas cosas cuando llegáramos a Ichiraku. Y ya estamos aquí.
—Pues sí, emm verás… Tú y Naruto tienen al zorro de las nueve colas dividido en dos y encerrado en
sus cuerpos.
—Sí, esa parte la entiendo. Lo que no entiendo es: ¿Quién lo puso dentro de nosotros? ¿Y por qué
nosotros?
—Bueno, no puedo decir todas las razones del por qué ustedes, solo diré que una de ellas es que el
mismo día del ataque… fue el de su nacimiento. Y sobre quién fue, fue el cuarto Hokage, solo eso te
puedo decir sobre el tema.
—Mmmm… bueno, gracias Iruka-sensei.
—Oh, hay otra cosa. El espíritu del zorro te afectó de una forma diferente, incluso diferente a Naruto.
—¿Enserio? ¿Como en qué?
—Bueno… antes de que pasara, tu cabello era rubio como el de Naruto. Eran gemelos idénticos.
—¿Qué?… ¿Otra cosa?
—Mmmm… no, o al menos ese es el único cambio físico visible que pudimos ver. Pero no se descarta
la idea de que el espíritu del zorro haya cambiado tu genética de alguna otra forma, y que la
podríamos ver en un futuro.

Tan-tan, osea fin (XD):

Pasó casi una hora, hasta que su hermano finalmente salió del lugar.

—¿Por qué tardaste tanto? —le interrogó su hermano al rubio.
—Ay…un niño apareció de la nada queriendo atacar al Hokage, pero se tropezó el solo y me echó la
culpa ese enano. Luego me dijeron que ese niño era el nieto del anciano —respondió Naruto con las
manos tras su nuca.
—El nieto… !Ah, sí! Lo he visto desde lejos un par de veces. Siempre lo andan llamando “honorable
nieto” y llenándolo de mimos y regalos solo por existir. En realidad hasta lo envidio.

Los dos hermanos caminaban a su casa en silencio, viendo por el rabillo del ojo lo de siempre: las personas susurrando cosas en contra de los dos. Todo estaba muy callado, hasta que pudieron presentir como alguien los observaba, pero no como los demás. Ambos hermanos vieron tras sus hombros, encontrándose con un par de pies sobresaliendo de una manta de camuflaje mal usada; ____ estaba
pensando a creer que era algún idiota queriendo hacerles una broma, pero Naruto ya se imaginaba quien era el dueño de ese mal disfraz. Los dos se dieron vuelta y siguieron su camino, restándole importancia al niño detrás de ellos. Solo dieron unos pasos más y volvieron a sentir pasos detrás de
ellos, pero Naruto no lo soportaría más.

—¡Ya sé que me estas siguiendo, así que ya basta! —le gritó al niño, quien se había escondido nuevamente de forma errónea en una cerca—. Es tan obvio que es patético —le confesó a su hermano.
—Así es.
—Jaja, descubrieron mi disfraz ¿eh? Los rumores sobre ustedes son ciertos, son fuertes —comentó el
niño saliendo de su… “escondite” —. ¡Muy bien! ¡Seré su aprendiz y ustedes mis entrenadores! —
prácticamente le ordenó a los gemelos.
—¿Disculpa? —soltó el azabache.
—¡Y después de eso, me tendrán que enseñar como es eso del jutsu sexy que hiciste con mi abue Hokage!
—¿Le mostraste el jutsu sexy al niño? —le preguntó ____ a su hermano en un susurro.
—No. Lo utilicé con el Hokage, pero creo que él nos estaba espiando.
—¿Tú crees? Oye niño, esto es una broma, ¿no es así?
—No… necesito un nuevo entrenador. Por favor jefes —suplicó el niño. Ya a Naruto se le iban a subir los humos a la cabeza.
—¿Jefes?
—Sí, ustedes son mis jefes. Jefes, jefes jefes.
—Okey, entendimos. ¡Ya callate, me estresas! —regañó ____ al niño.
—Bien, no podríamos negarnos —soltó Naruto, llamando la atención de su hermano.
—¿Cómo?
— Oh, vamos. ¿Qué puede salir mal?