Mi mirada seguía vacía y sin ningúna expresión el aire golpeaba en mi cara mientras trataba de acomodar mi cabello detrás de mí oído, la brisa de la noche se sentía más fría que de costumbre.
Estaba confundida, asustada y aterrada por todo lo que es...
Hoy mientras iba caminando con cathy hacia su casa nos encontramos con Alex, bueno, mas bien lo vimos. El ni siquiera se dio cuenta que nosotras estábamos pasando por ahí, estaba con una mujer, estaban discutiendo o eso es lo que podía observar, ella con la mirada baja y incluso podría decir que estaba llorando, Alex estaba sosteniéndola por el brazo, podía ver como su mandíbula se apretaba mas conforme el hablaba estaban discutiendo lo podía notar, pero no quería que el se diera cuenta que nosotras habíamos estado observando, no quería que pensara mal de mi, así que decidimos apresurar el paso.
Cathy, mi mejor amiga, durante todo el camino restante estuvo muy callada, pensativa y la verdad no sabia si era por la escena que habíamos visto o solo por otra cosa que le preocupara, así que me decidí a preguntarle:
—Cathy, estas bien?, te noto un poco callada— Ella solo se limito a tomar una gran bocanada de aire y soltarla con todo eso que había esta callando.
—Tani, sabes, se que Alex te gusta y te he visto mucho con el últimamente incluso en el trabajo, pero, sabes, Alex no es lo que parece, solo quiero que tengas cuidado con el ¿Si?
Estoy confundida
¿Alex no es lo que parece?, debería de creerle a cathy?, mi corazón solo puede ver lo lindo que es conmigo, además, es solo un amigo, si eso, amigo, solo eso.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
26 de octubre
Estaba preparándome para ir al trabajo pero recibí un mensaje de Alex, quería que nos viéramos.
Mi corazón se acelero en cuanto lo vi sentado en aquellos viejos columpios que afortunadamente quedaba cerca de mi trabajo. Sus ojos color marro me vieron y yo me sentí la persona mas afortunada, por que esos ojos me estaban viendo a mi, si, a mi, a la persona mas despreciable del planeta, la que tiene el cuerpo marcado por galaxias. Su cabello color ceniza se movía por culpa del viento frío de otoño y tan solo esa imagen hizo un vuelco en mi estomago, era perfecto.
Sus palabras suaves llegaron a mi de inmediato, en su semblante podías notar la tristeza que lo azotaba, había terminado con su novia y aun que no lo quisiera eso encendió un poco de esperanza en mi, ¿Esta bien sentirme así?, ¿Esta bien sentir un poco de esperanza sobre su tristeza?, aun así me dolía verlo tan decaído, quisiera poder pasarme todo su dolor, no importa si colapso, quería que sonriera y fuera feliz.
Y aunque ese momento que compartimos de dolor no duro mucho estoy segura que recordaré esos brazos cálidos abrazando mi cuerpo y esas palabras causando de nuevo una punzada de dolor en mí.
—De ahora en adelante tal vez pueda considerarte mi mejor amiga tani.
No sabia que esas palabras podrían causarme ese dolor.
