Exterior II

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" Solía escuchar esa canción, una y otra vez , hasta que las notas se confundían con el silencio de mi cuarto, y caía en un profundo sueño
-le dijo a León-.
¿ Y que soñabas ? - respondió León mientras bebía whisky- .
- Estaba aquí , fumaba en el balcón mientras me miraba atentamente, me analizaba y yo sentía constelaciones en todo el cuerpo. Su mirada era, hermosa, llena de una luz , que no he vuelto a ver en ninguna otra mujer -
¿ Tienes encendedor ? - preguntó con un cigarro entre los labios y continuó - Hoy es mi tercer día sin dormir, no puedo soñarla de nuevo, cada que despierto su recuerdo me rasguña la piel , y sangro.
- No puedes seguir con esto Horacio , simplemente ya no eres el mismo. - dijo Leon preocupadamente.
- Recuerdo que respirar dolía, me dolían los huesos , el corazón , y el alma. Los cigarros me saben a sus labios , el café a su piel ; veía el mundo a través del azul de sus ojos. - respondió ignorándolo.
Inhaló el veneno que humeaba en sus dedos, intoxicándose a llamaradas los pulmones, pero eso a el no le importaba. Deseaba morir, arrancarla de sus vivencias, de un sólo golpe.
- ¿ Qué sabes de la muerte ? - le preguntó Horacio a León con un gran nudo en la garganta.
- Nunca se regresa de ella - respondió Leon seguramente.
- Incluso las estrellas mueren ¿Sabes? , esos destellos de luz que vemos en el cosmos, provienen de la muerte de millones y millones de estrellas, pero la distancia hace que las podamos percibir . - argumentó Horacio - Es por eso que la muerte es bella. - dijo para inundar el lugar con un aplastante silencio.
- ¿ Y esto que relación tiene con que ella se haya marchado ? - comentó León rompiendo la nostálgica atmósfera en la que ambos estaban inmersos.
- ¿ Podrías prepararme un café ? Estoy muy agotado - le pidió a León , ignorándolo , una vez más.
León se levantó del sofá sin decir palabra. Caminó directamente a la cocina , encendió y colocó la tetera sobre la estufa.
De pronto escuchó un fuerte estruendo, corrió como reflejo y Horacio ya no estaba sentado sobre el sofá . Comenzó a buscarlo olvidando el fuerte golpe que escucho segundos antes . En su recámara, en el baño , en su estudio , dentro del closet , pero no daba con el . Regresó a la sala y vio el balcón , sin pensarlo corrió hacia el deseando que no fuera lo que pasó cual veta por su mente, pero lo vio en la acera, tendido sobre el charco de su dolor. Estaba pasmado, no quería creerlo , iba a volverse loco cuando de pronto entendió , comprendió la relación , ella era el basto cosmos y el , acababa de convertirse en una perpetua estrella , la escalofriante imagen que veía era la luz . Aquella madrugada , vio como Horacio regresó al océano galáctico bajo el que vive, desde entonces, ya no vería las cosas de la misma manera.
- La belleza es cruda - dijo llorando.
Escuchó la tetera, el agua estaba lista, Horacio hecho cenizas y el al sentir los helantes vientos de la mañana, bebió hasta perder la conciencia y caer. Mañana sería otro día ... "

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