Yuri x Natsuki (DDLC) / Fanfic (+16)

II. Tarde de pastelillos

Hoy ya es Sábado.
Comienzo a prepararme para recibir a Natsuki en mi casa, pues realizaremos juntas los preparativos para el festival.

Comienzo a peinar mi larga cabellera violeta, y procedo a colocarme una camisa de manga larga color beige junto con un pantalón negro y unos botines. Luego limpio y organizo en lo posible mi habitación.

Bajo al primer piso de mi casa en donde está la cocina, y procedo a ir a desayunar.
No suelo ver a mis padres en casa durante gran parte del día, mantienen trabajando. Y hoy estarán en un viaje de negocios del cual no llegarán sino hasta mañana a mediados de la tarde. Por lo tanto estaremos solo Natsuki y yo durante todo el día haciendo los preparativos.

Luego de desayunar me pongo a limpiar un poco la cocina, pues sé que Natsuki va a querer trabajar primero en los pastelillos.

Ya tengo todo listo. Sólo me queda esperar a Natsuki.

Tomo mi celular y le envío un mensaje a Natsuki de buenos días, y luego preguntándole a qué hora vendría para encontrarnos.

Hemos estado conversando constantemente desde ayer después de clases en cuanto le pasé mi número de telefono.

Somos amigas, gracias a Sayori que nos unió. Pero por nuestras diferencias, somos un poco distantes.

Más tarde...

Me encontraba sentada en un sillón de la sala leyendo un periódico, hasta que de repente escuché a alguien tocar del timbre.

Me asomé un poco por la puerta y luego la abrí.

—¡H-hola, Natsuki!—Saludé con un poco de sorpresa.—Puedes pasar, adelante.—digo abriéndole la puerta.

—¡Wow!—Dice Natsuki junto con una expresión impresionada en su rostro mientras observa el interior de la casa.—¿En serio vives aquí, Yuri?

—¡E-eh, Sí! Jeje...—Digo expresando timidez.—¿Es un poco exagerado?

—¡Está de lujo! Nunca pensé que vivieras en una casa tan grande y elegante.—Dice Natsuki sin dejar de observar cada detalle de la casa mientras camina explorando.

—E-eh... ¿Gracias? Supongo...—Digo con cierta timidez.

Me quedo observando un poco a Natsuki mientras está distraída...

Se le ve muy diferente sin el uniforme del colegio.

Ella llevaba puesta una camisa blanca y una falda rosa.

Su ropa denota tanta dulzura como ella.

Y su pequeño cuerpo y estatura la hacen ver muy tierna...

¡¿E-eh?! ¡¿P-pero qué estoy pensando?!

Me sonrojo.

—Sabes, siempre pensé que eras muy elegante y sofisticada, ¡y tu casa dice lo mismo sobre tí!—Dice Natsuki sin medir sus palabras—¿Eh? ¿¡Qué estás mirando?!

—¿E-eh? Y-yo... ¡Lo siento!—Digo muy nerviosa desviando mi mirada.

—¿Por qué estás tan sonrojada? Sabes... Aunque seas elegante, no dejas de ser muy rara para mí...—Dice Natsuki.