Thiago Maxwell

Capítulo 4

Capítulo 4: La Fiesta II

Me mira fijamente, sin despegar sus ojos de los míos, puedo fijarme que ahora su color ha cambiado, ahora lo tiene de un azulado más oscuro, ¿será por la noche? Quizá.

No sé que quiere de mi, pero tiene una cara de póker que no puede con ella, es imposible de descifrar, ni una mueca, ni una sonrisa, nada joder nada, que frustrante. Es como si constante mente estuvieses queriendo descubrir un acertijo. Aunque ahora mismo me tengo que tragar mis pensamientos porque acaba de hacer una pequeña sonrisa que nada bueno trae.

-¿Qué?.- inquiero yo ya cansado de la situación 

-Veo que tu amiguito se ha levantado.- me dice con una sonrisa picara

-Lleva levantado hace mucho rato, así que bájate el ego de las nubes, Superman.- le digo y veo como se le decae la sonrisa, bueno por lo menos le he podido quitar esa sonrisa de arrogante.

Claro que estaba empalmado por él, pero eso no se lo diría, joder si con ese solo toque me tiene así no me quiero imaginar cómo me pondría con otras cosas. Llevo literalmente media hora que tengo los huevos que me van a explotar, seguía empalmado, y me dolía hasta el alma, estaba seguro que cuando llegase a la residencia me lo iba a pasar muy bien. 

-¿Con quién mierdas has estado toda la noche?.- pregunta molesto frunciendo el ceño y apretando levemente la mandíbula

-Oye, ¿No tienes ninguna chica o ningún chico al que molestar?.- pregunto cansado, a lo que él niega con la cabeza

-Me gustas más tú.- dice, y noto como se seca mi boca en ese momento. ¿QUÉ? ¿Que yo QUÉ? tiene que ser broma o me esta vacilando una de dos, pero todo deja de ser broma cuando noto su labios carnoso encima de mis labios, oh joder esto es el puto paraíso, que locura. No me habían besado así en la putísima vida. 

Tiene la medida exacta para acoplarse junto con los mios, como si se tratase de las últimas piezas de un puzzle que necesitan ser tocadas para completar un precioso puzzle, pues eso era lo que estaba pasando en ese baño, a saber que hora serían y con la última persona con la que yo me pensaba que iba a ser besada. 

Noto como mi pantalón se va tirando cada vez más hacía arriba, y temo por si llega a romperse de la fuerza que esta haciendo, necesito sacarla lo juro, voy a explotar de un momento al otro. Por dios parezco un perro en celo que al mínimo contacto ya se esta corriendo.

¿Qué me esta pasando?

-Así que esto no era por mi eh Superman.- dice con su sonrisa de engreído máximo

-Cállate.- le digo y vuelvo a atacar sus labios. Sigo sin creerme que me este besando de esta forma con Thiago. 

Es que es Thiago, no es otro cualquiera, es él, al que todos temen, al que nadie le habla excepción de su amigo, al que nadie le intenta cuestionar nada ni menos encararle y yo en menos de 72h me he encarado con él, lo he insultado, he hablado con él y ahora me estoy besando con él. 

Verás tu la hostia va a ser bonita cuando me baje de la nube en la que estoy montado ahora mismo. Bueno, ahora mismo estoy mondado encima de Thiago. 

Nos seguimos besando durante un largo tiempo, hasta que de repente abren la puerta y Thiago me empuja con todas sus fuerzas haciendo que me dé la cabeza contra la pared. Miro apartando la cortina que había corrido en casos como estos, y me encuentro que es Ava la que se encuentra dentro y puedo empezar a respirar.

-¿Estás bien?.- le pregunto porque veo que tiene complicaciones para bajarse las medias. Ella pega un chillido, y se gira en mi dirección a lo que yo pongo una cara de angelito como si nunca hubiese roto un plato en mi vida.

-¿Qué haces tú aquí?.- pregunta extrañada.

-Estaba cansado de la música y de la gente y me he venido aquí.- le digo, y aprovecho eso para salir de la bañera, ya todo se había vuelto bastante frío, aunque yo seguía empalmado y con un dolor de huevos bastante malo. Le hecho una última mirada a Thiago que desde que nos habían interrumpido ni me ha mirado ni se ha movido y ahora tampoco lo había hecho. 

- Menuda tienda de campaña cariño.- dice partiéndose de la risa en mi cara.- ¿Pero quién te ha dejado así?, porque le voy a dar mi enhorabuena.- dice y se sigue partiendo de risa. Si solo supiese que el causante de todo eso, es la persona más temida por todos ellos y lo tiene justo en la bañera no se estaría riendo de esta forma. 

-No lo sé, no lo recuerdo, seguro que algún gilipollas.- le digo consciente de que él me esta escuchando, ya me importa bastante poco, le tiene miedo a algo, eso esta seguro. Quizá o le gustan que le vean con tíos, o no le gustan que le vean haciendo estas cosas, que sé yo. 

Agarro a Ava del brazo ya que los dos aún seguíamos bastante perjudicados, y vamos en busca de Jane, que según Ava tampoco la había visto en toda la noche. Que bien la primera noche que salimos los tres y los tres nos perdemos sin estar casi juntos. No sé si reírme o llorar

Finalmente encontramos a Jane que también nos estaba buscando a nosotros, aunque viendo como iba me parece a mi que hace poco que nos estaba buscando. Lleva todo el pinta-labios corrido hacía un lado, el pelo bastante desordenado, tampoco hay que ser un genio para saber lo que ha estado haciendo. 

Bueno yo no puedo hablar mucho...

Las acompaño a las dos a la residencia para que no vayan solas, y me vuelvo a la mía, no están muy lejos la una de la otra, y así me permito pensar un poco en todo lo que ha pasado esta noche. 

No sabía que estaba mal en mí, me gustaba lo que todos odiaban, ¿Estoy loco?, bueno yo diría que mi cabeza no riega muy bien, pero de verdad me tiene que pasar a mí. Estaba seguro de que yo a él también lo había dejado en mal estado, lo había notado cuando estaba encima de él. Había notado todo, y cuando digo todo es todo, no puedo ni saber como es que no me he lanzado de ello a eso, tiene pinta de estar bien dotado, solo de imaginarlo ya vuelvo a estar empalmado, perfecto, parezco un adolescente en plena pubertad descubriendo las pajas, me doy asco.

Llego a la residencia, y me tiro de lleno a la cama, estoy tan cansado que ni dedico mi tiempo en quitarme la ropa. 

Lo único a lo que le dedico mi tiempo es a pensar en esos ojos azules oceánicos y en qué me voy a ir a dormir con un dolor de huevos infernal. 

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Aquí les traigo otro nuevo capítulo. :) Si hay alguna falta de ortografía pido perdón por ello. 

¿Empezamos a odiar a Thiago, o de momento no?

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