Despertar en la oscuidad y desorientado no es un buen sentimiento. Tampocó lo es si te enteras que moriste y vas a reencarnar bajo la apariencia de otra persona.
¿Que tan malo pude ser convertirse en el familiar de una enana pelirosa?
El lugar era oscuro, no se apreciaba absolutamente nada en aquel pozo de oscuridad infinita. Mi cuerpo o lo que alguna vez considere mi cuerpo, fue borrado de la existencia y en parte de mi memoria. Por algún motivo que desconozco, no podía recordar o hacerme la idea de la razón del por qué me hallaba en tal efimero lugar.
Un sentimiento desconocido comenzó a embargarme hasta que finalmente pude recordarlo como el "miedo".
Sentia que mi conciencia o solo tal vez el flujo de mis pensamientos, tambien se desaparecian con la oscuridad que me arropaba.
Por alguna razón me negue a aceptarlo. algo me impedia a solo soltarme y quedar completamente en el olvido.
Y fue ahi cuando finalmente algo cambio.
"Sigue el sendero"
Yo estaba confundido, no sabía de dónde había venido a esa voz. pero algo si llamo mi atención, mi vista había notado que apareció una línea blanca y conducía por un Páramo un tanto tenebroso.
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como no tenía nada mejor que hacer, decidi seguir las líneas para ver hasta dónde me llevarian y también ver si encontraba el propietario de esa voz. Solo tal vez tendría alguna explicación del por qué me encontraba aquí y por qué no podía recordar absolutamente nada.
Luego de caminar por un aproximado de veinte minutos las líneas terminaron de guiarme hacia lo que parecía una puerta, así de la nada levantada y sin ningún tipo de soporte. La puerta parecía algo extraña, no sabría cómo explicarlo pero parecia emanar un extraño aire misterioso.
Yo no le di mucha importancia y decidí entrar para salir de dudas. Al momento de entrar, una luz blanca me encegueció y al abrir los ojos pude notar que la puerta por donde entre había desaparecido completamente sin dejar rastro alguno. miré a mi alrededor y me asombro que ahora el lugar ya no era oscuridad absoluta sino blanco, un blanco tan pálido que se podría comparar a las hojas de un papel vacío. pude finalmente apreciar mejor mi cuerpo y noté que iba vestido con ropa formal, como si fuera alguna fiesta o alguna reunión importante, en realidad no podía recordar lo bien.
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