You're a fucking Monster |4|

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Los Angeles, California, 12:30 p.m

P.O.V ______

Abrí los ojos, pero inmediatamente los cerré al sentir tanta luz en mi cara, volví a intentar abrirlos esta vez mas despacio, cuando logre despertarme mire en donde me encontraba.

Definitivamente este no es mi cuarto y todo lo que paso supongo que ayer no fue una pesadilla.

Me encuentro en una habitación blanca con unas ventanas tan altas que llegan al techo y estas están adornadas con cortinas transparentes del mismo color que la habitación, afuera pude visualizar un balcón y más allá de este era todos árboles, como si fuera...un ¿bosque?.

Arriba en el techo había una gran araña de cristal muy sofisticada. Mire hacia mi cuerpo el cual estaba cubierto con una sábana blanca

Me senté en la cama con cuidado para no marearme y pude ver en el piso una alfombra que abarcaba el mismo formando un mándala muy hermoso.

No sé cuánto tiempo pude estar sentada mirando a la nada hasta que sentí que alguien abría la puerta, rápidamente agarre las sabanas y me cubrí el cuerpo mirando con miedo a la persona que entraba

Él no era el mismo chico con el que hable la otra vez, de hecho eran muy diferentes físicamente.

Él tiene ojos verdes, pelo color café obscuro y esta vestido con un traje negro y unos zapatos del mismo color como si fuese a ir a una fiesta de etiqueta.

-Haz, lo que tengas que hacer y sal te voy a estar esperando afuera. -dijo sin mas para retirarse por donde vino

Me levante de la cama y abrí una de las puertas que habían pero eso era un gran armario lleno de ropa ordenada simétricamente al igual que zapato, lo que me llamo la atención es que todo lo que había era de mujer. Cerré la puerta para abrí la otra y la única que quedaba, al ver que era el baño entre, me mire al espejo por unos segundos y no pude aguantar más.

Tengo odio, miedo hacia esa persona que me secuestro, no sé qué me van hacer, no si se mi van a matar, no se si voy a volver a ver a mi familia, a mis amigos, a mi papá. No se si el esta bien o si lo mataron

Solo veía a una chica cansada. Con su maquillaje corrido, los pelo jodidamente enredados, y con odio mucho odio.

Las ganas de llorar me invadieron nuevamente pero tenía que mantenerme fuerte, aunque soy débil tengo que demostrar lo contrario. Siempre. Baje un poco la vista y vi un cepillo de dientes literalmente nuevo. Lo tome y obviamente cepille mis dientes, hice mis necesidades. Me mire por última vez al espejo, y abrí la puerta del baño, después abrí la puerta por la que salió el chico castaño para encontrarlo espaldas.

-Ya estoy lista -susurre cansada de todo esto pero lo suficientemente alto para que me escuche, evidentemente me escucho porque inmediatamente se dio la vuelta para escanearme de arriba abajo con la mirada, me hizo un gesto con la cabeza de "sígueme" y eso hice.

Caminamos por un pasillo largo y casi interminable, a mi derecha habían luces en las paredes y a mi izquierda había un gran balcón, más adelante puede ver una escalera igual a la que hay del otro lado y por ende se unen en el pasillo por el cual estoy caminando.

Desde aqui arriba se puede divisar un gran mándala en el piso a unos pasos antes de llegar a la que supongo es la puerta de la casa o mejor dicho mansión. El mándala es parecido a la alfombra que hay en la habitación en la que estuve solo que este mándala es mucho más grande y no es un alfombra.

Arriba en el techo hay una enorme araña de cristal "-que caro para que solo sean criminales".-pensé.

Bajamos por la inmensa escalera hasta llegar al mándala que vi desde arriba después doblamos a la derecha para llegar a la sala de estar...creo

-Siéntate y no te muevas -me indico aquel chico castaño con autoridad para desaparecer por una de las puertas que habían. Me senté con muchos nervios en uno de los sofas mas grandes color negro pensando en lo que me pueda estar esperando.

En frente de mí se encontraba una gran pantalla plasma pegada a la pared y debajo de la misma habia una mesa con una Xbox, Wii y muchos juegos, al lado de la mesa habia otra más pero de cristal con muchos vasos y botellas del mismo material con bebidas alcohólicas

-Nos volvemos a ver, sweety. -mire asustada a mi izquierda al escuchar esa voz ronca que me pareció familiar, para encontrarme con aquel chico de ojos color miel caminando hacia mi.

Las manos me empezaron a sudar y el corazón empezó a latir tan fuerte que tenía miedo de que lo escuchara, me quede callada mirando cada movimiento que hacía, pero cuando se sentó a mi lado baje la cabeza haciendo que mi pelo creara una cortina.

Se agotó mi paciencia

-No des vueltas y dime donde mierda esta mi papá. -le pregunte entre dientes, enojada, cansada y dolida por toda esta situación

-Hey, que niña tan mal educada, ¿Tus padres no te enseñaron que esas palabras no se dicen? -dijo burlón acomodándose en el sillón

-Y a ti tu madre no te enseño a no matar, secuestrar y amenazar personas -pregunte sarcástica

Lo mire fijamente, pero al ver sus ojos me arrepentí totalmente de haberme hecho la valiente.

Me agarro del cuello con una mano y puso mi cabeza en el apoya brazos del sofá

-!No vuelvas a nombrar a mi madre¡, !escuchaste¡, !no la vuelvas a nombrar¡ -me gritó rojo de ira - Tu a mí no me conoces, así que no me busques porque soy fácil de encontrar, si yo quiero puedes desaparecer en un jodido segundo y nadie se daría cuenta porque solo eres una puta inservible. No me toques los cojones porque no voy a soportar que ninguna niñata como tú me falte el respeto en mi propia casa, así que ni se te ocurre volver a mencionar a mi madre. -escupió con odio.

Sus ojos ya no eran color miel, se habían convertido en negro, un negro que asusta. Solo puedo ver odio y sentir como apretaba cada vez más su agarre.

Aunque intenté sacarle la mano es inútil prácticamente no tengo fuerzas

-¡Que mierda, Justin! -escuche una voz varonil gritar para luego sentir como el peso de ese hombre se ya no estaba, automáticamente al sacar su mano de mi cuello empecé a toser e intentar buscar aire.

Me siento muy mareada

-¡Sueltame, mierda!. -gritó desesperado intentando soltarse del agarre del chico que lo saco de encima de mi

-Eres un jodido monstruo -le dije mirándolo a los ojos sintiendo mis lagrimas caer

Intento acercarse a mi nuevamente, pero lo retuvieron aun mas fuerte

-Tienes que calmarte, enfocate en tu maldito trabajo Justin -escuche como uno de los chicos que había entrado lo trataba de calmar mientras se lo llevaba

-Hey, ¿Estas bien? -escuché a alguien que me habla pero no fui capaz de contestar, intente levantar la vista pero antes de poder ver quien era la volví a agachar por inercia al sentir la luz en mi cara.

Estoy mareada. Hice una mueca de malestar y me agarre la sien. Todo esta dándome vueltas

-¿Qué te pasa?. -lo escucho de nuevo, pero no puedo pronunciar una palabra.

Me duele la garganta, me mata el dolor de cabeza.

Siento como aquel desconocido me alza en brazos

-No me toques -le digo en un susurro casi inaudible intentando hacer que me suelte pero fue en vano, apenas y puedo abrir los ojos.

La luz me molesta mucho, más de lo que debería

Antes de caer inconsciente pude ver como la sombra de Justin corría hacia mi

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Holi:3, les quiero agradecer a todas las que leen la novela y votan, son muy lindas todas y muy tiernas

También Les quería pedir perdón por no subir capítulos muy seguidos, pero intentare que no vuelva a pasar.

XOXOXOXO

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Broken |Justin Bieber|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora