IV

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Al Jin estar cerca de infiltrarse con su pequeño grupo de soldados dio la señal a NamJoon y ataviado en la armadura del príncipe apareció MiChin, había una ligera similitud entre ellos, misma piel, cabello, misma altura, por un momento NamJoon incluso admitió que eran bastante similares, Jin en cambió no vio ninguna similitud, el príncipe tenía un aura serena y tranquila, a veces incluso demasiado tranquila, al contrario, MiChin solo tenía rabia en su aura, aunque con ese traje también solo podía ver su prepotencia y orgullo, lo único que quería es que al fin se deshicieran de él y volver a su pueblo.

Al enemigo ver al "príncipe heredero" asomarse se prepararon para una batalla frontal, tanto así que Jin pudo observar cómo comenzaban a desorganizarse tomando nuevas medidas entre secuestrar o directamente matar al príncipe. Vio una oportunidad de avanzar hacia las provisiones y se lanzó para quemarlas.

Mientras tanto en el campo de batalla YoonGi apareció también con la armadura real, una táctica para confundir, pero al integrarse al combate el enemigo se abalanzó a él y cayó de su caballo, al otro lado MiChin bajó de su caballo y comenzó a atacar al enemigo de una manera brutal mientras que YoonGi atacaba de una manera más elegante. Ante la confusión NamJoon entró en pánico y el enemigo se fue dando cuenta al mismo tiempo que el ejército real.

Pronto trataron de juntar a ambos príncipes y así capturar a ambos.

Jin comenzó un incendio y salió con su pequeño grupo para tratar de evacuar lo más pronto posible

YoonGi fue arrastrado con su tropa al lugar donde se encontraba MiChin, y mientras más se acercaban más caótica se tornaba la situación, MiChin recibió una grave herida en su ojo y al acercarse uno de sus compañeros lo llamo "su majestad" vio cómo se reunían a su alrededor y lo protegían, al voltear el verdadero príncipe se acercaba, pero las llamas ya se acercaban a ellos y ambos ejercito trataban de escapar.

MiChin se acercó a YoonGi en medio de la huida y lo atacó en el ojo igual que él, al estar herido MiChin trata de matarlo, pero un par de guardias lo atacan, él los mata y apuñala a YoonGi, pero la avalancha de gente huyendo de las llamas los separan antes de poder asesinarlo, pero por lo que puede ver el príncipe ha muerto, luego un enemigo lo ataca a él y todo a su alrededor oscureció.

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HaNa observaba a lo lejos el incendio

-JiMin- dijo acercándose a su hermano- ¿Qué crees que estas pasando?

-Nada bueno- dijo abrazando a su hermana tratando de consolarla- tenemos que ser cuidadosos, todos van a ir a los bosques y el pueblo

- ¿crees que él vuelva? - dijo HaNa temerosa

-No- dijo tajante- deja de pensar en eso. Toma el arco -dijo dándoselo- tenemos que casar y ya no tienes marido ya te toca ayudarme otra vez

-Eso fue hace mucho tiempo

-Practica, de nuevo lo harás bien

HaNa y Jimin se adentraron profundamente en el bosque a cazar

HaNa no podía evitar pensar que su mala suerte la perseguiría hasta al final y que él volvería y su vida seria una pesadilla de nuevo, esas semanas sin él, sola junto a su hermano eran tan preciadas para ella que de alguna manera deseaba que no acabara la guerra para asegurar que él jamás volviera.

Pasarón tres días y al bajar al pueblo él apareció.

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NamJoon y SeokJin estaban apenados y desesperados mientras el Rey enojado gritaba por la vida de YoonGi quien había llegado en estado critico a la capital, habían ganado la guerra y ahora el problema sería aquellos que habían escapado y rondaban la zona, sin embargo, nadie tenia ni un solo pensamiento para esto por la vida el príncipe.

El doctor real salió

-El príncipe está estable, la mayoría de sus heridas son superficiales, pero no sabré el estado de su visión hasta que despierte

La tensión en el ambiente bajo un poco

- ¿Cuándo despertará? – preguntó el rey

-Deje que descanse, mañana volveré

El doctor se despidió agotado de trabajar en el príncipe por tantas horas, había estado al borde de la muerte, pero la buena fortuna estuvo de su lado y sobrevivió, no sabía el destino de aquellos soldados.

TaeHyung se apresuraba a detener a su padre puesto que NamJoon solo obedecía ordenes, sin embargo, entendía perfectamente que su padre estuviese alterado

-Padre, YoonGi esta bien y NamJoon solo obedecía las órdenes del príncipe heredero- el rey se quedó en silencio- ni siquiera pudimos tocar la marcha ceremonial para que la gente sepa que triunfamos

El rey se sentó y con cansancio y derrotado después de dos largas noches en que pensaba en que su hijo podía morir simplemente asintió

-Pueden retirarse, deseo estar solo- dijo mientras todo el peso del estrés y el cansancio lo agobiaban

SeokJin y NamJoon preocupados deciden quedarse en el palacio solo para asegurarse de que el príncipe está bien.

- ¿Qué le pasó a mi hermano? – preguntó el gran príncipe

-El incendio provocó una avalancha humana y lo perdimos, un soldado que huía reconoció al príncipe cuando lo atacaron y fue a rescatarle- contó NamJoon

-Ha sido peligroso para él estar allá- reflexionó- ¿el enemigo se retiró?

-Solo sabemos que han sido derrotados, no hay manera que sobrevivan el norte sin suministros y sus bajas fueron grandes

-Pero- interrumpió SeokJin- muchos se convertirán en bandidos y atacarán a civiles inocentes, hay que enviar tropas para la seguridad de los pueblos del norte

TaeHyung reconoció el acento del soldado

-No te preocupes, enviaremos tropas al norte, mi intención no es que la gente sufra

-Gracias su majestad

TaeHyung se retiró a dar las ordenes para los soldados y también para asegurar que su hermano y su padre estuviesen seguros ya que podía ver que la varga del reino ya era muy pesada para el rey, YoonGi tendría que casarse y ascender al trono pronto.

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En la casa de HaNa ella limpiaba las heridas de MiChin, se preguntaba si debía salvarlo, o dejarlo morir, nunca imagino que una figura tan penosa apareciera luego de tantos días, pero otros soldados sobrevivientes pronto inundaron las calles y para el momento que se dio cuenta de su alrededor ya había curado más de 50 soldados heridos.

Era de noche, nadie se daría cuenta, diría que su fiebre había empeorado y que las heridas se abrieron y moriría desangrado, vio el cuchillo carnicero con el cual el imaginó tantas veces matarla a ella, pero en cuanto él se quejó del dolor ella lo ayudó, no podía, incluso si él era un miserable no podía matarlo, su conciencia no podría dejarla en paz. Ella no era un monstruo.

Al acomodarlo mejor ella subió la vista a su cara para revisar la herida de su ojo y descubrió que él había despertado, su cuerpo se heló de terror al verlo, pero la sorpresa la invadió cuando detectó que él la miraba con miedo

- ¿Quién eres? - le preguntó y ella pálida no supo contestar

DaechwitaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora