Just A Wish (Número Cinco y tú)

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"____ Patterson"

— ¿Por que Luther está tan unido a tu viejo yo?  — pregunte a Cinco caminando detrás de ellos yendo hacia la plaza.

— Seguro que el lo convenció de algo, me conozco — el grandulón paró su camino esperándonos.

— Hola hermano ¿Como estás?

— Quiere asesinarme ¿verdad?

— ¿Que? ¿El dices? ¿Que quiere asesinarte? Si, claro. Es ridículo

— Luther deberías aprender a mentir porque lo haces terrible. Además, tu hermano no es idiota.

— Eres un pésimo acompañante — le dijo Cinco.

— ¿Y de quien es la culpa? ¿Para que me hiciste venir si no vas a escucharme?

— ¿Entonces admites que conspira contra Cinco? — pregunte incrédula.

— ¿Admite que Cinco sufre de psicosis paradojal?

— Sufrí de mucha claridad sobre ti y tus intenciones asesinas — respondió Cinco.

— No es que él planee matarte en serio. El solo quiere matar a una versión de ti.

¿Que mierda? Ok retiro lo dicho que los hermanos de Cinco no son idiotas.

— Pero yo soy una versión de mi — dijo Cinco.

— Oye, a mi tampoco me encanta pero él tiene un buen plan.

— ¿Cual? ¿Uno en que me aniquilan y saltan para el 2019 y para salvar el mundo?

— Si ¿Como lo sabes?

— Porque el es Cinco — le respondí obvia.

— Y eso es lo que haría yo si intentara matarme — respondió Cinco.

— Solo se que tenemos a un Cinco de más y tú estás maniático — dijo Luther viendo a su hermano.

— ¿Maniático? Luther, no has visto nada. ¿Quieres un maniático? ¡Te demostraré uno! — exclamó Cinco.

— Ok, como tú auxiliar, lo mejor que puedo hacer es acabar con tu sufrimiento.

Esto ya está colmando con mi paciencia.

— Ok bien, Luther escucha — dijo Cinco tomándolo de brazos — se que tu mente débil solo responde a la edad y la autoridad, así que ponme atención. Otra vez salen a la luz tus problemitas con papá. Esta vez con tu propio hermano, lo que me saca de quicio. No debes de olvidar que soy 14 días mayor que él. Yo tengo prioridad por edad, es a mi a quien debes de escuchar, Luther...¡Yo soy tu padre aquí!  — grito lo último llamando la atención de algunos.

— Cinco, por favor estas llamando demasiado la atención — le dije — se que esto te inquieta por tu estúpido hermano pero ¡Mírate!

— Admito que existe la posibilidad de que no esté del todo...en mis cables. Pero, si yo estoy aquí, él también.

— ¿Que? — preguntamos Luther y yo al mismo tiempo.