Bad Bye ˢᵒᵒᵏᵃⁱ - [Adaptación]

C A P I T U L O D O S

Hueningkai no sabía donde se encontraba pero no le importaba en lo más mínimo.
Después de unas horas desde simplemente perdió el conocimiento y hora se encontraba en mi na habitación que no era la suya. Y para su fortuna tenía la ropa puesta. Sus ojos se estaban acostumbrando a la luz que entraba por la ventana del cuarto. Suspiró, se levantó haya quedar totalmente sentado en la cama, la cabeza le dolía a mares.

La puerta de la habitación se abrió, dejando ver al mesero del bar, sonriendo con vergüenza.

"Lo siento" murmuró mirando al suelo.
"Pensé que seguían durmiendo"

"Está bien no te preocupes" pronuncio Hueningkai mientras se paraba.
"Discúlpame a mí, por invadir tu hogar"
Seguramente era un desastre "¿No?" río.

"sí" murmuró con una sonrisa tierna.
"Pero no podía dejarte ahí" estiró su mano y sonrió."Un gusto me llamo Bae Seung-min".

Hueningkai tomó la mano y la estrechó.
"Hueningkai"

"Bueno Hueningkai, te invito algo de comer y unas pastillas, has de tener la cabeza un lío" confesó Seung-min, Hueningkai afirmó. "¿Cuántos años tienes?"

"27"

"¡Entonces eres mi hyung!" exclamó mientras salía del cuarto y Hueningkai detrás de él. "Tengo 20".

"Oh... ¿Y vives solo?" preguntó mientras notaba que eran los únicos que se encontraban en el departamento.

"Sí" afirmó mientras se sentaba en una mesa, dónde ya se encontraba servida la comida. "Por favor, siéntate y come, hyung"

Hueningkai lo hizo, y mientras estaba ahí había olvidado por completo la desgracia de su vida, haciéndolo sentir bien aunque sea por un momento. Comió en silencio ante la atenta mirada del chico quién parecía querer descifrar la mirada rota de Hueningkai.

"Si quieres saber algo, pregunta" soltó Hueningkai mientras miraba fijamente a Seung, este desvío la mirada sintiéndose avergonzado.

"Lo siento..." murmuró él menor mientras tomaba un poco de jugo, Hueningkai le pareció demasiado tierno.

"Aish ¿Quieres saber el porqué estaba ayer en el bar?" inquirió Hueningkai mientras bebía, Seung-min casi se atraganta con lo que estaba comiendo mientras negaba. "Igual te lo diré, ayer cumplía 7th años de casado, y mi esposo llegó con papeles de divorcio, se a enamorado de alguien más" tomo un poco de fideos para intentar bajar el nudo que se había formado en su garganta. No quería recordar y menos volver a casa, Seung-min se sentía culpable al ver la cara de su hyung, se reprimía mentalmente por esa curiosidad que lo había calcomido.
"¿Puedo pedirte un favor?"

"Claro hyung" aceptó Seung, porque era lo menos que podía hacer, después de hacerlo recordar aquello.

𑁍𑁍𑁍

Hueningkai se encontraba envuelto bajo en las cobijas del cuarto de Seung-min, mientras sollozaba y sentía que sus energías se iban. Maldecido el no ser suficiente para SooBin, si el tan solo lo hubiera tratado como cuando lo estaba conquistando, dándole regalos, cumplidos y cantarle al oído las canciones que le dedicaba, tan solo tal vez, Soobin seguiría al lado de él.

Eres tan patético, ¿Creíste que SooBin se iba a quedar al lado de alguien como no tú? No vales nada, de lo que vale él.

Se estaba odiando. Y aunque quería negarlo aquella voz tenía razón.

De sus frágiles labios se escapó un sollozo, al sentir las palabras de Soobin resonar por su cabeza, pero aún más doloroso el hecho que olvidará su aniversario. Sus ojos se sentían pesados, estaban totalmente rojos, su nariz estaba roja y sus labios secos.

Sabías que tarde o temprano esto iba a pasar, Hueningkai. Todos se aburren de tí.
Tu primer mejor amigo, tu primer novio e incluso tu madre.

No quería escuchar más. A su mente llegó las escenas más dolorosas de su infancia, recordándole que ni siquiera la mujer que le dió a luz se quedó con él. También cuando su mejor amigo le engaño con su novio, mientras se reían en su cara diciéndole que jamás sería suficiente para alguien. Porque aquel dolor que sentía era cada día, más fuerte haciéndolo sentir tan vulnerable e inútil.

Es porque así lo eres.

Sintió su garganta secarse y un hueco en el estómago, al recordar quién lo había sacado de esa depresión.
Soobin, quien con caricias, besos y cumplidos le hizo creer que realmente valía como persona.

Vaya que gran mentira.

Porque siendo así el mismo, hudiendolo de nuevo, en aquel asfixiante agujero.

No puedes echarle la culpa a alguien, es tuya.

No podía con el dolor que sentía en su corazón, porque había dado todo por SooBin, hasta lo que no tenía, aún así.
Nunca fue lo suficiente para el.
Las lágrimas bajaban sin parar y sus sollozos eran cada vez más fuerte, su pecho se oprimía. Tan no tendría a SooBin para sacarlo de ahí.

Afuera de la habitación se encontraba Seung-min, quien si quiera conocer bien a Hueningkai sentía el dolor que el transmitía con sus sollozos. Quiso golpear al causante de aquel llanto.