Kise Ryouta x Reader "¿Existe alguna razón?"

"¿Existe alguna razón?"

Exhausta llegabas a tu casa, la escuela es un poco pesada en estos días por los exámenes, lo único que deseabas era distraerte un poco, tomaste un balón de básquet que estaba en tu habitación.

Si… juegas baloncesto y eres buena en ello, todos te elogian y admiran incluso formas parte del club en la escuela, en fin tomaste el balón entre manos y saliste de casa, fuiste directo a una cancha en el parque estaba completamente sola, no había nadie quien te distrajera después de un día tan pesado.

Suspiraste y empezaste a jugar anotando varias canastas, sentir el aire en tu rostro te relajaba, tus brazos se movían con facilidad, anotar para ti no era difícil, llevas practicando el juego hace tiempo, pasaron varias horas y no mostrabas estar cansada.

En el silencio de la pequeña cancha se escucharon unos pasos acercándose, te sobresaltaste y volteaste hacia atrás, era un chico, no respondiste y en silencio lo observaste.

-Oye…-. Dijo con una voz posesiva, como si se tratara de un tipo arrogante.

Solo lo observaste frunciendo el ceño esperando a que hablara.

-Hmph-. Sonrió, de alguna manera estaba frente a ti.

Diste un paso hacia atrás y te tomo del brazo.

-Oye… solo quiero jugar contigo-. Se acerco a tu oído y te susurro.

-¡Suéltame!-. Le gritaste apartando su mano de tu brazo. 

-Shhhh… causaras problemas si gritas-. El chico no dejaba de mirarte y pensabas en varias posibilidades para salir de ahí.

-Además… ¿Qué hace una chica tan linda como tú a estas horas?-. Se agacho por el balón de básquet que estaba a su lado. -¿Juegas baloncesto? Impresionante-. Pudiste notar que su sonrisa no estaba llena de buenas intenciones.

Asentiste y comenzó a botar el balón.

-Entonces… hagamos esto-. Tomo el balón de nuevo en sus manos y te miro. –Juguemos, si me ganas te dejare pero… si te gano, iras conmigo-. Por el tono de su voz y esa sonrisa suya piensa que eres débil por el hecho de ser mujer, no ibas a dejar que alguien como él se burlara de ti. Aceptaste y te preparaste para ir en contra suya, porque si el ganaba… estabas perdida.

……………….

-Maldita…-. Dijo el chico cansado y arrodillado. Te había subestimado.

Se levanto del suelo con el sudor deslizándose hasta caer en este. –Tch…-. Refunfuño y te miro por unos cuantos segundos, no dijo palabra alguna, tomo su mochila y se alejo.

Suspiraste, la noche era fría y habías pasado mucho tiempo fuera de casa, en realidad no te importaba ya que tienes tiempo libre. Finalmente observaste tu celular, ya era más tarde de lo que creías, tomaste el balón que estaba ante tus pies dispuesta a caminar hacia casa.

*Tap* *Tap*

De nuevo escuchaste unos pasos acercarse a ti, ¿Otra vez este tipo? Pensaste, ignorándolo quedaste de espalda.

-Oye...-. Esta vez, era una voz amable. Volteaste enseguida a la voz que te llamaba. Encontraste a un chico alto, rubio, ojos dorados, cara bonita, su sonrisa que se formaba lentamente en sus labios provoco que te sonrojaras.

-Genial~ -. Te dijo alegremente.

-¿Eh?-. Respondiste confundida.

-Lo siento, pero no pude evitar ver como jugabas hace rato con ese chico, en verdad eres genial~~-. Su elogio hacia ti te dejo sin palabras. Su cabello se movía al son del viento y esos ojos dorados no apartaban la vista de ti, mostrando una cálida sonrisa.