19 Años Después (Scorbus) [COMPLETADA]

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(Albus)
Albus tenía alguno de los ingredientes que se necesitaban para el félix felicis. Los que le faltaban los podrían robar o conseguir. El lunes Albus y Scorpius fueron a ver a James. En ese momento estaba solo.

Eh, James - lo llamó Albus.

¿Qué? - preguntó James acercándose.

¿Te acuerdas de hace cuatro años cuando nos colamos en el despacho de Slughorn para robar unos ingredientes, hacer una poción multijugos y venderla de contrabando? - preguntó Scorpius.

Sí - contestó James sonriendo.

Pues queremos volver a colarnos, pero esta vez para coger cosas para hacer un Félix felicis y usarlo en los TIMOS, - dijo Albus - y queríamos pedirte que nos ayudases a robar las cosas, y si estás dispuesto a aceptar el riesgo mínimo de morir, intoxicarte o mutar por beber un félix felicis mal hecho, te podemos dar un bote.

¿Has dicho que hay riesgo de morir, intoxicarse o sufrir una mutación? - preguntó James.

Bueno, sí, pero el riesgo es mínimo, solo si me sale mal, y nunca he hecho un félix felicis, pero sé como hacerlo, y se me dan genial las pociones - dijo Albus.

¡Vale!, - dijo James - será divertido.

La semana iba pasando. Albus y Scorpius le contaron que estaban saliendo a Rose.

Por fin - dijo ella cuando se lo contaron.

Rose les contó que estaba saliendo con Austin Mcnully, un chico de Slytherin que estaba en séptimo.
Aparte de a Rose, aún no se lo habían dicho a nadie. Albus y Scorpius pasaban tiempo con James, Ellie, Ethan, Rose, Lily y Hugo.
Llegó el viernes por la noche. Albus y Scorpius se dirigieron a la sala común de Griffindor cruzando uno de los pasadizos. Cuando llegaron vieron a James.

Vamos - dijo Albus.

Los tres se dirigieron al despacho de Slughorn. James forzó la cerradura con la navaja, como lo hizo hacía cuatro años, la última vez que fueron a robar al desp de Slughorn.
Albus les dijo lo que tenían que buscar. Después de tres horas buscando lo encontraron todo lo que le faltaba, excepto un ingrediente.

No creo que lo tenga, - dijo Scorpius - llevamos mucho rato buscando.

Ya, yo tampoco lo creo - dijo Albus.

Da igual, vámonos, conozco a alguien que puede proporcionarme ese ingrediente - dijo James.

Albus y Scorpius lo miraron con curiosidad.

No preguntéis - dijo James.

Los tres se fueron del despacho de Slughorn. Se separaron. James se fue hacia la sala común de Griffindor, y Albus y Scorpius a la de Slytherin. Albus y Scorpius entraron en el dormitorio de Slytherin.

¿Cuánto tiempo llevará preparar el félix felicis? - preguntó Scorpius.

Seis meses - respondió Albus.

Llegó el día siguiente. Era sábado. Albus y Scorpius estaban en la sala común, haciendo deberes. Cuando los terminaron Albus y Scorpius estuvieron un rato con James y Ellie.
Esa noche Albus y Scorpius iban a ir a la sala común de Griffindor, y explorarían pasadizos con James.
Ya era de noche. Albus cogió el Mapa del Merodeador de su cuarto, y Scorpius y él se fueron a la sala común.

Vamos al pasadizo que lleva a la sala común de Griffindor - dijo Albus.

Vale - dijo Scorpius.

Scorpius le dio a Albus un beso en los labios. Nada más separarse James salió de debajo de la capa de invisibilidad. James sonrío. Albus se ruborizó.

¿Qué haces aquí James? - preguntó Scorpius incómodo.

Eso, no se suponía que nosotros íbamos a la sala común de Griffindor - añadió Albus.

Ya, pero es que sabía que estabais saliendo, Ellie y Lily también lo sospechaban, ¿por qué no me has dicho nada?, soy tu hermano - dijo James.

Ya, lo siento, pensaba contártelo - dijo Albus.

¿Hay algo más que no me hayas contado? - preguntó James.

No, y aunque lo hubiese, ¿por qué tendría que contártelo?

Porque soy tu hermano mayor, nos llevamos bien, y no hay nada de mí que no sepas - respondió James.

Vale, pero vámonos - dijo Albus.

Los tres se fueron y estuvieron explorando los pasadizos. A Albus le molestaba un poco que su hermano se metiese tanto en su vida, pero por otro lado le gustaba que su hermano se interesase por lo que le pasaba. Pero se había pasado, que hubiese preguntado, y Albus le hubiese dicho la verdad, tampoco hacía falta colarse en la sala común con la capa de invisibilidad para espiarlo.