Me vengaré de ti| Camren

3. La Propuesta

Camila se sentó contra las almohadas de felpa que estaban apoyadas contra la cabecera de su cama. Vestida con camisón, estaba muy involucrada en su último libro. Su teléfono celular sonó de repente, rompiendo el silencio. Rápidamente colocó un marcador entre las páginas y tomó el teléfono de la mesita de noche. Cuando vio el numero, sus esperanzas se desplomaron. Sabía lo que significaba esa llamada. Respiró hondo y respondió.

"Hola mamá."

"Hola, querida. Lamento llamarte tan tarde.
¿Estabas a punto de acostarte a dormir?"

"No exactamente. Solo me estaba poniendo al día con la lectura."

"Esa es mi Camila, siempre con la nariz en un libro. De todos modos, la razón por la que llamo es . .."

"Vas a cancelar nuestra reunión para el desayuno." Camila interrumpió con tristeza.

Sinuhe suspiró. "Lo siento, cariño. Te prometo que haré algo por ti. Tengo que tomar un vuelo a París esta noche. No podría cancelar este asunto urgente".

Pero podrías cancelar conmigo.- Camila pensó.
"Claro, mamá. Lo Entiendo." Ella respondió, tratando de posponer el manto de soledad que la envolvía. "¿Cuánto tiempo vas a estar allá?

"Quizás una semana. Al menos esperamos que sea así. Y cuando regrese, te aseguro que desayunamos juntas y además te compensaré por todo"

Camila sonrió con tristeza. "Seguro mamá."- Aparento hacer sonar su voz convencida.

"Gracias por entender, Camila. Ahora, tengo que irme.
Hablemos pronto, ¿de acuerdo?"

"Sí, por supuesto."

"Cuidate querida."

"Chao"

Después de colgar, Camila ya no estaba de humor para leer. Dejó el libro a un lado antes de apagar su lámpara de noche. Inclinándose bajo las sábanas, trató de contener las lagrimas.
Sinuhe a menudo rompía las promesas que le había hecho y estaba acostumbrada, pero eso no significaba que la decepción doliera menos. Luego, pensó en la familia Jauregui. Clara era una buena madre. Qué maravilloso debe ser tener mucha atención y amor las 24 horas del día. Camila estaba segura de que Lauren y sus hermanos nunca se sintieron descuidados. Lauren y sus hermanos ... Una sonrisa apareció en los labios de Camila. El partido de fútbol. Chris la había invitado a verlos jugar mañana por la mañana. No se la esperaba, por lo que sería una sorpresa total para Lauren. Con una pequeña sonrisa aún jugando en sus labios

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Camila se miró en el espejo por última vez antes de irse. Llevaba un simple vestido de verano, su cabello estaba suelto con rizos perfectos y solo usaba un poco de maquillaje. Miró la hora en su teléfono celular y vio que faltaban cinco minutos para las 10:00. Esto significó que los Jauregui solo han estado en el parque alrededor de treinta minutos. Perfecto. De todos modos, era mejor llegar elegantemente tarde. Camila decidió no molestar al conductor por la mañana, por lo que condució su propio auto para llegar al parque. Su hermoso Lexus negro. Rara vez conducía sola, ante la insistencia de su madre. Pero su madre no estaba allí y se arriesgó.

Encontró fácilmente un lugar para estacionarse y salió del auto. El parque era bastante grande, pero no había mucha gente. Cuando escuchó muchos gritos distantes, los siguió y pronto se encontró con un gran campo de hierba. Al instante vio a Lauren correr con la pelota en la mano mientras otros tres chicos intentaban atraparla, pero no eran rival para la velocidad de Lauren. La morena se movía con tal gracia, naturalidad y agilidad, que inmediatamente impresionó a Camila. Lauren pronto llegó al área y anotaron un touchdown, golpeando la pelota en el suelo en victoria.