Me vengaré de ti| Camren

6. Camaradas

Con un par de jeans y una camiseta, y con el cabello ligeramente mojado, Camila finalmente salió del baño. Lo primero que vio cuando entró en la habitación fue a Lauren sentada en la cama, frotándose los ojos con el centro de la mano. Aparentemente, la morena acababa de despertar, pero Camila no estaba completamente convencida. Nadie puede tocar ... o acariciar a alguien así mientras duerme. ¿O sí?

Camila permaneció en la puerta del baño y se aclaró la garganta para hacer notar su presencia. Lauren la miró con ojos somnolientos.

"Creí oír el sonido del agua". Lauren bostezó, notando el cabello húmedo de Camila.

"Sí, acabo de salir". Camila respondió con voz temblorosa.

Lauren levantó los brazos en el aire y con un gemido se estiró. Los ojos de Camila permanecieron en la parte superior del cuerpo de Lauren y sintió que su corazón saltaba al recordar a Lauren sin camisa anoche y su abdomen perfectamente esculpido. Ella miró hacia otro lado y se mordió el labio inferior. Apenas podía mirar a Lauren, recordando lo que había sucedido hace unos cuarenta minutos. "Um, ¿Lauren? Cuánto... ¿Cuánto
tiempo llevas despierta?"

Lauren dejó caer los brazos y miró a Camila con los ojos medio abiertos y el cabello hecho un desastre. "Literalmente acabo de despertar". Ella respondió con una voz más ronca de lo habitual. Camila miró incrédula e insegura a Lauren.
Lauren enarcó una ceja interrogatoria en respuesta. "¿Por qué?"

Camila sintió que su rostro se ponía rojo al recordar la sensación de la mano de Lauren acariciando su cuerpo de arriba a abajo. ¿Lauren realmente estuvo durmiendo todo el tiempo? Estudió la expresión de Lauren y la morena la miró, totalmente desorientada.

'Uh, unn. Por nada," Camila forzó una sonrisa y negó con la cabeza.

Caminó hacia la puerta. "Escuché a tu mamá preparar el desayuno. Creo que le ayudaré". Mintió.

En unos segundos y antes de que Lauren pudiera decirle otra palabra, Camila ya estaba afuera de la habitación. Camila bajó las escaleras y notó que la casa estaba extrañamente silenciosa. Fue muy inusual en comparación con la confusión que creó la familia Jauregui en las últimas horas del día. Mientras caminaba hacia la cocina, escuchó a alguien moverse. Abrió la puerta y, como sospechaba, Clara estaba preparando el desayuno. La mujer mayor miró hacia arriba y sonrió.

"¡Camila! Buenos días."

"Buenos días, Sra. Jauregui." Camila sonrió, entrando a la cocina. Se puso de pie y se apoyó con las manos en el mostrador, colocándose frente a Clara.

" ¿Dormiste bien?"

'Uh ..." Antes de responder, los pensamientos de Camila volaron hacia el incidente con Lauren, momentáneamente. Pero rápidamente los apartó, sacudiendo la cabeza. "Sí, por supuesto. Dormí rnaravillosamente bien."

"Oh, bien. Me preocupaba que la cama de Lauren no fuera demasiado áspera."

"Estuve cómoda ."

"¿Y por qué te levantaste tan temprano?"

"Bueno, normalmente tengo que levantarme temprano, así que pensé que podría ayudarte con el desayuno. ¿Si no le importa?"

"¿Por qué me importaría? Sería bueno tener una mano más. He sido madre durante 17 años y ninguno de mis hijos se ha ofrecido a ayudarme a cocinar".

"¿Nunca?"

Clara negó con la cabeza. "Nunca. Los chicos no quieren tener nada que ver con eso. Traté de enseñarle a Lauren una o dos cosas, pero no lo entendió. Prefiere ensuciarse las manos ayudando a su padre con trabajos de plomería".