Una spark y un corazón pueden fusionarse

Capitulo 15: Vulnerabilidad

Cuarto capitulo del maratón

Me ha costado mucho escribir este capitulo y no tengo idea de porque, pero bueno, espero que haya quedado decente. El siguiente les va a gustar mas (o no, porque creo que ya saben lo que se viene).

Como sea, les dejo el cap.

Disfruten la lectura.

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Si algo odiaba Dánae era sentirse tan vulnerable frente a otras personas, pero si había algo que odiaba mas que eso, era recibir miradas de burla cuando se trataba de su trabajo. Así, fue como momentáneamente logro olvidarse de lo sucedido a la entrada de Jasper mientras discutía acaloradamente con el encargado de la ferretería, quien le había preguntado despectivamente "si estaba segura de que no se había equivocado de local porque la tienda de electrodomésticos estaba al lado".

Después de un par de minutos de discutir, el empleado por fin atendió su pedido y se retiro a la trastienda a traer los materiales que la chica necesitaba. Dánae suspiro cansada, se hubiera ido de esa tienda, pero al parecer no había otro sitio cercano tan bien surtido. Después de un par de minutos, el sujeto llego con las cosas que había solicitado. Dánae le entrego la tarjeta de crédito que Fowler le había dado para ese tipo de gastos (financiados por el ejército, lo cual era la cosa más útil que había hecho Bryce en mucho tiempo).

Mientras le cobraban, Dánae noto incomoda que el tipo del otro lado del mostrador estaba mirando con descaro las marcas que se había hecho en los brazos unos momentos atrás. La chica ya estaba demasiado molesta, pero eso no evito que se pusiera ligeramente incomoda, mientras lamentaba no haberse puesto una prenda de manga larga ese día.

Al final, dejo que un par de empleados de la tienda cargaran los materiales (eran muchos y muy pesados) mientras ella compraba una botella de agua en una de las tiendas de al lado. Se lamento haber perdido así el control, sin embargo, con lo que había estado sucediendo...se pregunto por un momento si no seria mejor haberse ido de Jasper, pero casi de inmediato se reprendió internamente por haber pensado eso. Jasper era su hogar, lo único que la hacia sentirse identificada con algo: con la vida apacible y tranquila de la ciudad (aunque últimamente su vida no era nada apacible y tranquila).

Suspiro antes de dirigirse hacia donde estaban terminando de dejarle los materiales a Optimus, ella le agradeció el favor que le estaba haciendo y regresaron a la base en silencio, La atmosfera se había roto y la chica no se sentía con suficiente animo como para encontrar otro tema de conversación, así que su viaje de regreso transcurrió mientras la chica miraba el desierto con aire triste, mientras Optimus la cuidaba esperando que estuviera bien. Solo cuando estaban a unos minutos de la base, la chica rompió el silencio.

—Yo...quería darte las gracias, Optimus —murmuro tímidamente, pero su amigo le puso toda la atención posible —Se que sobre reaccioné a algo que no tenia mucha importancia. Perdón si fue muy...exagerado.

—No tienes que disculparte, Dánae —murmuró el prime con tono cálido para calmar a la chica—No se que haya sucedido, pero entiendo que fue algo dificil para ti. Y si necesitas hablar con alguien puedes contar conmigo —Dánae sonrió agradecida, aunque realmente no tenia ganas de hablar de las cosas que la atormentaban con Optimus, ni con nadie en realidad.

Llegaron a la base, y ya con los materiales recién llegado ella volvió a trabajar en el pequeño proyecto que Ratchet le había asignado, al mismo tiempo que el doctor hablaba con Optimus de los cálculos que habían estado haciendo antes de que el líder saliera de la base. Dánae hizo lo posible por distraerse y olvidarse de lo que había sucedido, pero no lo logro hasta que escucho a Ratchet intentando establecer comunicación con Arcee.