...como hoy, en los que el sueño me deja extasiado, días en los que una palabra me desarma, días en los que la realidad y la ficción se difuminan, días en los que el alma y el cuerpo se separan 3cm, días donde me ahogo con el aire, días de dolores invisibles, días de espacio inexistente, donde un minuto se vuelve un día, uno como hoy.
Es por eso que, en días como hoy, saco del armario mi mejor yo, quien camina al trabajo y agrada al espectador, mientras me quedo inerte en el suelo.
A veces hay días, días como hoy.