Y asi encontraron el amor en el dolor

Capítulo 4: La cena de los malentendidos

Punto de vista de Hachiman

El aire estaba frío cuando iba a recoger a la hermana pequeña de Kawasaki. A veces desearía rechazar algunas solicitudes. Podría estar ya en casa comiendo una comida deliciosa hecha con mi dulce imouto y luego acostarme en mi cama sin hacer nada, pero no podía decirle que no a ella por este tipo de servicio. Keika tenía este poder para activar mis viejos instintos de cuando Komachi tenía su edad. Fue como volver a tener una hermana pequeña. Llámame siscon, no me importa.

Unos minutos más después de que finalmente llegué a la entrada de la guardería. Rápidamente hice mi camino adentro.

¡Ah calor!

Los padres y un miembro del personal me miraron de manera extraña, pero la situación se aclaró cuando le presenté el papel de Saki a la señora a cargo, ella sonrió y me dejó entrar.

"¿Keika?" Nadie reaccionó.

"¡¿Kei-?!" Fui interrumpido por un peso repentino que casi me hizo caer al suelo. El rayo me golpeó con fuerza.

"¡Haa-chan!" La niña estaba radiante y se derritió el corazón del solitario que dejó que una sonrisa adornara su rostro.

"Yo Keika. Estoy aquí para recogerte y llevarte a tu casa" dije mientras acariciaba su cabeza.

"Ok Haa-chan pero ¿dónde está Saa-chan?" Inclinó la cabeza mientras hacía su pregunta y me miraba a los ojos.

"Me dijo que te recogiera porque está cuidando a tu hermano Taishi que está enfermo". Respondí aquí poniendo mi mano palmeante en mi bolsillo.

"¡Ok! ¡Quiero ir a cuestas a casa!" Ella saltó con entusiasmo.

Me reí entre dientes mientras los recuerdos de un komachi más joven inundaban mi mente y me arrodillé para levantar a Keika y colocarla aquí sobre sus hombros.

Luego, los dos salieron de la guardería y se dirigieron a la casa Kawasaki. Hikigaya es guiada por una dulce y sonriente Keika. Habiendo llegado a la entrada de la casa. Llamó a la puerta 3 veces.

"Ya voy !" Dijo una voz femenina a toda prisa. Solo pude escuchar algunos pasos antes de escuchar que se abría la cerradura, seguida poco después de que la puerta se abriera a un Kawasaki Saki con una camisa gris informal que mostraba un hombro con una correa para el hombro y un delgado jean negro. Toda la salida está cubierta por un delantal de cocina violeta. Estaba a la mitad de mi oración de saludo, pero esta vista me interrumpió y me quedé paralizado en el acto. Sentí que el calor subía por mis mejillas.

Podría acostumbrarme a eso...

Espera ¿EN QUÉ DEMONIOS ESTOY PENSANDO AHORA MISMO?

¡No te sonrojes así Kawasaki, me lo harás aún más difícil y lo entenderé mal!

"P-Deja de mirar, c-entra o te resfriarás" tartamudeó.

"O-oh ..." Dejé a Keika que nos miraba con curiosidad y luego irrumpió dentro de la casa. Seguí a Kawasaki adentro después de que ella me asintiera con la cabeza para darme permiso para entrar.

"Disculpe mi intrusión." Dije cuando pasé el marco de la puerta y luego me quité los zapatos.

Caminé lentamente por su casa hasta la sala de estar mientras ella me seguía. En mi camino miré todas las fotos familiares en las paredes. Este lugar no ha cambiado mucho desde la última vez que vine aquí. Siguen emanando las mismas vibraciones de 'Hogar' y 'Familia amorosa'. Una vez que llegamos a nuestro destino. Kawasaki me dijo que esperara aquí un momento para decirle a Taishi que viniera a saludarme por cortesía, supongo.