La apuesta

batidos y burlas

Viernes, 19 de septiembre

Salimos tarde de la clase porque era de
una a cuatro, la mayoría de la escuela
va a una tienda de batidos en el centro,
no suelo ir a lugares como esos pero mis
amigos quieren ir, Evie se sube al auto y los otros a los suyos, voy detrás de ellos porque no sé dónde queda el lugar, mi novia me había pedido ir pero no me llamaba la atención y la llevaba a otro lugar, a pesar del sitio a donde la llevara no se conforma con eso.
Cuando llegamos todos bajamos de
los autos y tomo la mano de Evie, nos
reunimos con los demás y entramos a la
tienda.

-Aquí van sólo los adinerados- dice
una de las chicas.
-Ya oíste Louis- dice Evie dirigiéndose
a él.
-Vamos Evie, Louis si puede pagar un
batido
-Saben quién no lo podría pagar?-
dice la misma chica del grupo y todos
negamos Pues el chico raro nuevo

Nadie sabe el nombre de ese chico, ni
siquiera lo dicen cuando pasan la lista,
es tan marginado que ni amigos tiene,
bueno, un chico raro como el qué
amigos podría tener?, ni los nerds se lo
pasan con el En los almuerzos suele
irse y no come en la cafeteria, tal vez tenga
alguna deformidad que no lo deja comer
por la boca, eso tiene sentido del porque
no come en públicoo.

Una de las chicas se sorprende y se
tapa la boca, no la entiendo hasta que
veo a los otros sorprendidos, veo a la
misma dirección que ellos y al verlo me
sorprendo. El chico raro trabaja aquí.

-Esto se pondrá bueno- dice Evie
Chicos-chasquea los dedos y la
seguimos.

Nos sentamos en una mesa en el medio
de la tienda y hablamos sobre lo que
pediremos, el chico se desliza de un lado a otro y no entiendo hasta que veo que trae unos patines, todos nos reímos pero intentamos mantenernos serios. Cuando el llega a nosotros frunce el ceño y mira su libreta.

-Qué no te enseñaron modales?-
pregunta Evie molesta.
-Como si tú los tuvieras- dice el chico y
Evie frunce el cefño.
-Dame un batido dietético- dice una
de las chicas Pero no quiero que lo
prepares tú, no sé qué enfermedades
puedas tener.
-Lo siento querida pero necesitarás algo
más que eso, un gimnasio- dice el chico
y descuida, yo no preparo cochinadas
como esas que pides-frunzo el ceño, es
molesto escuchar como el se burla de
mis amigos.
-Quéte pasa?-le digo y el me ve.
-Algo más?- pregunta el.
-Quiero uno de mango y cuatro de
vainilla -digo, el chico los anota y se va.

Evie y las otras están molestas por como
El chico actuó con nosotros, fue molesto y ahora entiendo porque es así.

-Tengo una idea- dice Evie.

Nos cuenta el plan y suena genial, tal vez se merece algo por la forma en la que nos ha tratado. El chico viene con una bandeja y nos entrega los batidos, se va y luego regresa con otra bandeja para otra mesa, derramo el batido al piso y cuandoo El chico pasa se resbala con los patines y cae; los batidos caen sobre el y nos reímos por eso, luego los demás se ríen. El se limpia un poco y se levanta como puede, luego se va.

Fue una buena broma.