Después del desayuno seguimos hablando con George y decidimos que un día iríamos a la ciudad y buscaríamos alguna discoteca.
De momento ibamos a jugar a fútbol.
- ¿Que os parece chicos contra chicas?- dijo Theo
- Bien, siempre que aceptéis qué os ganemos- dijo una chica
- Debería decirte lo mismo-
- Ahorrate las molestias, sabes que no ocurrirá, los chicos no ganareis-
Empezamos a jugar y a decir verdad me sorprendió lo bien que jugaban algunas personas, bueno eso hasta que decidimos dejar de tomar el juego en serio. Al final parecía que estabamos jugando a rugby mas que a fútbol.
- Muchas gracias Adam, gracias a ti parece que un alienígena me ha vomitado en los pantalones- dije con tono irónico
- De nada- una sonrisa pícara apareció en su cara.
- Cambiaros, ducharos... En 1 hora comeremos- anunció George.
Subí rápido a la habitación, llegué antes que Dan asi que me metí primera a la ducha. Cogi unos shorts, y una camiseta en la que ponía "Free hugs". La sensación de las gotas de agua cayendo por mi piel era tan agradable que no fui consciente del tiempo que llevaba allí hasta que Dan empezó a golpear la puerta como si le fuera la vida en ello.
- Venga Margot, tengo que entrar-
- Ahora salgo, lo siento se me ha pasado el rato-
Me envolví en la toalla y saqué la ropa fuera para evitar perder más tiempo. Salí del baño para que Dan pasara.
- A buenas horas, bonita-
- Lo siento- dije alargando la "e"
Me aseguré de que la puerta estaba cerrada y la cortina cerrada, y me cambié. Me desenredé el pelo y decidí dejarlo mojado.
- Dan voy bajando para ver si necesitan ayuda en la cocina- grité
- Vale, enseguida iré yo también- respondió desde la ducha.
- Holaa, ¿Alguien necesita ayuda?- pregunté en cuanto llegué a la cocina.
- Si no te importa ayudar a Susan con la mesa- dijo Theo
- Vale- en ese momento Susan entraba por la puerta- ¿Qué falta en la mesa?-
- Saca vasos por favor- cogí vasos y los llevé, los distribuí por las mesas y cuando hube acabado volví a la cocina donde ya se encontraba Dan.
- Vale... Ya está todo listo, que alguien los llame para comer-
- Yo iré- me ofrecí.
Llamé a todas las puertas mientras pregonaba por los pasillos que la comida estaba lista. Me aseguré de que Ed bajaba a comer ya que la mitad de actividades se las saltaba, si le era posible. Incluso si se trataba de comer. Me sorprendió encontrar su habitación vacía, iba progresando y por alguna razón me sentía orgullosa de ello.
Bajé al comedor donde estaban ya todos sentados, y me senté en una silla que había libre entre Dan y George.
- ¿A ti qué te han dado?- preguntó Dan.
- ¿A mi?, A mi nada ¿Por?-
- Parece que seas hiperactiva-
- Sólo me siento bien- respondí, y me llevé un trozo de pollo a la boca. La comida no estaba mala, pero digamos que tampoco era la mejor.
[...]
Empezaba a anochecer. Nos sentamos en círculo alrededor de una fogata y estuvimos hablando, riendo, cantando... un buen rato. Mi móvil comenzo a sonar, mire la pantalla, no me gustó nada lo que vi en ella. Me alejé un poco y descolgue.