Revengers: Agentes de ARGUS

3.- Un gran cambió

—Noruega, 1945.

Oscura era la noche y fuerte la lluvia sobre un pelotón de soldados de Hydra; todos y cada uno de ellos inconcientes o muertos. Entre la niebla y humo del lugar, se vislumbró un brillante escudo dorado con águila en el, solo para revelar que su portador era, Soldier Boy.

—Entrada despejada, veo la guarida de Zemo ¿Me copian?— hablaba un Soldier Boy más animado y con antifaz —Tienen la vía libre para invadir el terreno, cambio y fuera— Soldier Boy simplemente guardo en su cinturón el enorme radio con el que se comunicaba y miro un tanto impaciente a si alrededor —Jumm... algo tarde...

—¿¡Decías!?— exclamó alegre una chica rubia que llegó a gran velocidad, dejando detrás de sí una estela de relámpagos; la chica vestía con una camiseta roja y un pantalón amarillo, ambos lo suficientemente ajustados como para mostrar su figura; todos acompañados de un elegante antifaz negro con ella —Vaya, no había peleado contra tantos soldados desde que peleamos juntos en Budapest— decía la velocista, mientras se quitaba mechones de cabello mojado del rostro

—Tranquila Jess, no hay nada que hacer, tal vez Zemo sea importante para Hydra, pero Cráneo Rojo se está llevando toda la atención con el señor "Orador América"— sentencio con tono burlón Soldier Boy

—Aw... te vez tan tierno cuando estás celoso de atención, Dean— respondio alegre Jesse Chambers —tenemos una misión aún más importante ¡Es el Barón Zemo! No mandan a nadie para atrapar...

—O matar— interrumpió Soldier Boy

—Se, se, se. Acciones más, acciones menos Dean, el punto es, que no mandaron al Capitán América ¡Nos mandaron a nosotros! ¡A Soldier Boy y Jesse Quick! ¿Lo vez? Somos mejores que esos payasos que bailan y salen en  el radio— Jesse estiró ambos brazos y los cruzo detrás de su cabeza, mientras miraba el puente que conectaba con el castillo de Zemo

—¿Estás lista para lo que haya dentro?— pregunto sonriente Soldier Boy, mientras se ponía en guardia y sacaba su arma

—Siempre.— Jesse a gran velocidad se acercó a Soldier Boy y beso su mejilla, solo para volver a su posición y golpear su puño con la palma de su mano —¿Y tú Dean? ¿Soldier Boy? ¿¡Soldier Boy!?— la voz de Jesse lentamente se fue tornando en una más juvenil y un tanto preocupada, hasta que entonces, Soldier Boy abrió los ojos

—Idaho - Estados Unidos.

—¿Que?— pregunto el aún somnoliento super soldado —¿Dónde est...? ¿¡Que demonios paso aquí!?— exclamó sorprendido Soldier Boy, encontrándose en el Jet de ARGUS, pero con Ilyana y Pietro de frente, observándolo, un tanto asustados y preocupados