8.- Escape de la ciudadela

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Los héroes vagaban entre disparos y ataques de mutantes, metahumanos y agentes de ARGUS, todos en un profundo caos; Soldier Boy solo portaba su escudo y mantenía a los jóvenes héroes detrás de el, mientras daba pasos entre cadáveres, prisioneros y guardias, poco o nada importaba quien fuera, ahora estaban muertos.

—Quédense atrás, yo voy bien al frente y...— Soldier Boy, fue rápidamente interrumpido cuando un relámpago de intenso naranja paso frente a el y golpeó un guardia

—¿Tenemos algún plan?— pregunto Ilyana, mientras cargaba energía azul y la lanzaba contra unos cuantos agentes de ARGUS, para así abrir el camino

—Si, ir al jet ¡Ahora!— ordenó Soldier Boy, poco antes de ser cubierto por la túnica de Capa, que los transportó hasta el interior de un jet, terminando por dejar sorprendidos a los héroes —Voy a admitirlo, es fue un tanto anticlimatico...

—¿¡Dónde está Daga!?— pregunto el encapuchado joven

—Pietro, buscarlas y traelas aquí—ordeno Soldier Boy, a lo que el velocista de plata se fue a gran velocidad, solo para volver luego de un par de segundos

—Emm... ¿Dean? Creo que tienes que ver es...— antes de que Pietro terminará de hablar, el sonido de una explosión los interrumpió a todos, haciendo que el jet en el que iban se ladeara de manera violenta, haciendo que todos cayeran

—Pietro y Capa, protejan a Ilyana, Katana, ven— ordenó Soldier Boy, corriendo con katana detrás de el, solo para que al salir, no solo se topará con todos los demás jets destruidos, además del suyo, sino que ahora había encontrado a sus amigas perdidas

—Tawagoto— susurro Katana, mientras miraba al frente; Lamplighter estaba junto a un pelotón de ARGUS, con Wolfsbane, Mirrage y Daga, todas atadas y de rodillas

—Esas son esposas inhibidoras, si haces algo estúpido, voy a estallar en llamas— exclamó de manera burlona Lamplighter, mientras meneaba su antorcha

—¿Eso no matará a tus agentes de ARGUS? ¡Tarado!— grito Soldier Boy, mientras sacaba lentamente un revolver que escondía en su antebrazo, siendo cubierto por su escudo

—ARGUS, mutantes, el punto es vive y deja quemar ¿No?— pregunto sonriente el Lamplighter, mientras sus soldados se mostraban un tanto aterrados

—Eres un maldito loco...— susurro Daga, intentando soltarse

—Es raro, las esposas no funcionan del todo bien con esta, y bueno, la india no debería tener bozal pero bueno... es muy rara— respondió Lamplighter, con una mano detrás de su espalda —¡Vamos a ponernos serios! ¿Quieres?— pregunto Lamplighter, mientras de giraba sonriente hacia una torre de la ciudadela que explotó —¡Wow! Ese fue uno grande... ¿Vez todo esto? ¡Es arte! ¡Nada del estúpido niño en New York que "piñta el futudho"!— tras que Lamplighter dijera esto, una estela plateada paso a gran velocidad detrás de los agentes, extrañandolos, incluso a Lamplighter —Bueno... esa mierda fue extraña, en fin, quien quiere ar...— grande fue la sorpresa de Lamplighter, cuando notó como es que ya no estaban las tres chicas

—¿Der?— pregunto Pietro, mientras estaba recargado en el jet que iban a tomar —Viejo, eres muy lento...

—Y están a punto de partirte la cara a nivel grupal...— sentencio Wolfsbane, mientras tomaba un aspecto más bestial

—No.— dijo a secas Soldier Boy, mientras guardaba su arma u daba algunos pasos al frente —Tu y yo, déjalos fuera de esto, idiota ¿O te da miedo?

—Claro, claro, claro ¿Quieres enfrentarte a mi llameante personalidad eh? Bueno, creo que...— el escudo en el pecho de Lamplighter fue lo primero que sintió antes de tocar el suelo, pues Soldier Boy ya había atacado

Revengers: Agentes de ARGUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora