.

4.1K 359 33
                                    

Jin

A pesar de que me gusta mucho, sé que jamás se fijaría en mi porque quién estaría con alguien al que llaman ratón de biblioteca y no lo culparía, porque, incluso teniendo la oportunidad de verlo en la única clase que tenemos juntos no dejo poner atención a la clase, pero, en mi defensa con la ayuda de Yoongi lo observo cuando va a la cafetería sin que se de cuenta, bueno... eso creo. Recuerdo la primera vez que lo vi iba caminando por el pasillo y había demasiada gente porque querían quienes eran los nuevos estudiantes, tratando de pasar accidentalmente choque con uno de ellos y así fue como con solo una mirada me enamoré perdidamente de JungKook, pensé que era el chico más atractivo que he visto en mi vida, lo que realmente me terminó por atraerme más a él fue cuando lo vi tan entregado al baile en su primera presentación en la universidad, eso fue lo que más me cautivo... su pasión. Para mi inexistente suerte hoy no asistió, al terminar la clase sin ganas me dirigí a la cafetería encontrándome con mis amigos.

Yo pienso que deberías decírselo, no pierdes nada con intentar. -Terminé de servirme de la barra del buffet, volteé hacia atrás para mirar a Yoongi sirviéndose puré de papa.

Pero Yoongi! -Hice un puchero, rogando para que no me sermoneara de nuevo.

Nada de peros Jinnie. -Esta vez habló mi hermano Jimin. Yoongi hyung tiene razón, llevas suspirando por él desde que llegó a la universidad y eso fue hace cuatro semestres. -Sabía que a mi hermano le preocupaba que me hiciera ilusiones de tener alguna oportunidad, pero realmente no tengo las agallas para declararme, di un suspiro cansado, no tenía esta vez excusa.

Solo no quiero que me rechace, ya tengo suficiente con ser llamado el ratón de biblioteca. -A veces me sentía mal con ese apodo, si no fuera por mí hermano y mis amigos me seguirían molestando.

No creo que lo haga. -No me había dado cuenta que Moonbin hyung había llegado.

Es lo mismo que yo digo hyung. -Alego Yoongi detrás de Moonbin, una vez que nos sentamos en la mesa para comer seguimos con la plática.

Y... ¿Cómo lo sabe hyung? -Comencé a caminar hacía la misma mesa de siempre, hace poco me comenzaron a preguntar si en algún momento le diría mis sentimientos.

Bueno... si no gusta de ti no creo que sea cruel al rechazarte, él parece ser educado. -No entiendo porque tanta insistencia.

Solo lo dice porque sale con su primo, Sanha. -Sonríe triunfante porque en parte tenía razón, Sanha no era de los populares, pero, sí Moonbin hyung que destaca en el área del arte y en los deportes de la universidad siendo una persona muy extrovertida y carismática al igual que mi hermano, mientras que Sanha viene siendo el número en el área de composición de música teniendo una personalidad seria y algo fría con la gente que lo rodea, aunque en su defensa cuando lo conoces más a fondo es una persona muy agradable y divertida, recuerdo todavía cuándo Moonbin hyung andaba detrás de Sanha sunbae dejándole notas en su casillero deseándole un bonito día o comprándole postres para la hora de su descanso, yo no estoy corriendo con la suerte que tiene Changkyun, creo que ni siquiera sabe mi nombre, así que declararme es una mala idea, muy mala idea.

Pero lo que dice Moonbin es cierto, a parte tu eres muy tierno dudo que te rechace. -Mi hermano me sonrío para luego despeinarme.

Lo dices porque eres mi hermano. -Entre tanto jugueteo con mi hermano no me di cuenta que nos estaba mirando Jungkook mientras fruncía el ceño para luego caminar al lado de nuestra mesa, pude sentir como mi hermano me tomó de la mano para salir del trance ¿Qué fue eso?

No pierdes nada, además si te sientes mal puedes contar con nosotros, para eso están tú hyung ¿No? -Retomando la plática Moonbin me dio un abrazo.

Recuerda que se esta acercando su cumpleaños, ¿Ya tienes algún plan? -Por ultimo comentó Yoongi sin dejar de comer, de verdad si me estaba animando a regalarle algo sin caer en la vergüenza.

Ya entendí. -Solté una pequeña risa, sin decir nada más todos nos concentramos en comer, después de un rato tomé mi celular para checar la hora, casi me atraganto con mi jugo, solo faltaban cinco minutos para mi clase y mi suéter se manchó por mi descuido ¡Hoy no es mi día!

Chicos me retiro, ya voy tarde a mi clase. -Tomé mi bandeja para dejarla en las repisas que están en la entrada de la cafetería para volver y tomar mis cosas, él único que se había percatado de mi accidente fue mi hermano.

Jinnie creo que te manchaste un poco. -Asentí tomando la servilleta que me estaba ofreciendo para pasarla por mi suéter, sin tener éxito se seguía viendo la mancha, rápidamente me despedí para salir corriendo al baño, estaba tratando de quitarme la mancha que no me di cuenta que alguien también se encontraba en el baño.

Hola. -Esa voz... sin creerlo levanté mi cabeza, mi sorpresa fue grande al verlo ahí parado hablándome.

H-hola-a. -Me golpeé internamente, es la primera vez que me habla y no puedo hablar bien.

¿Necesitas ayuda? -Preguntó, su mirada es diferente a la que normalmente veo cuando pasa por los pasillos, siempre esta serio sin emoción alguna.

G-graci-ias-s, es-stoy-y b-bien. -Obviamente es una mentira, ya que se arruino mi suéter favorito y estaba pasando frío en pleno enero, dudando de mi respuesta se acercó un poco más a mi, lo cuál mi corazón se encuentra a mil por hora.

Pero estás temblando. -Tocó mi mano, por poco pensé que me fallarían las piernas, sin perderle de vista las manos miré cada movimiento que hacía. Y estás frío.

No-o importa. -Se quitó su chaqueta quedándose solo con una camiseta negra ajustada marcando todos sus músculos, pensé en desmayarme en ese momento por ver tan sexy escena, pero tengo que verme normal.

Toma. -Al principio no sabía a que se refería, pero, después de extender su brazo ofreciéndome su chaqueta entendí a que se refería.

No quiero molestarlo. -Negué con mis manos, estaba totalmente apenando porque no sabía como referirme a él. ¿Hyung?

Supongo que si, ¿Cuantos años tienes? -Me preguntó sonriendo sin bajar su mano donde tiene su chaqueta, tiene una bonita sonrisa.

Diecinueve. -Contesté algo apenado por la atención que me estaba dando en ese momento.

Tengo veintiuno, toma. -Sintiendo mis nervios tomé la chaqueta de su mano y al ponérmela pude percibir el perfume que usa JungKook, no pude evitar sonreír ante esto, saliendo de mi trance tenia que agradecerle por él gesto.

Grac-cias hyung, mañana se la entregaré a primera hora. -Traté sonreír, puedo jurar que en este momento mi cara esta totalmente roja.

No es necesario, si quieres puedes usarla el tiempo que quieras. -Negó haciendo un movimiento con su cabeza.

¿En serio? -En mi voz se podía percibir la sorpresa ¿Cómo así de la nada me presta su chaqueta? Y sobre todo el tiempo que quiera, esto es increíble.

Por supuesto. -Sin estar tan consiente me arropé un poco más en un abrazo, impregnandome más de su olor.

Me queda algo grande. -Era algo obvio ya que JungKook es más grande que yo y ni hablar de su cuerpo bien trabajado, salí de mi pequeño trance al sentir la mano de JungKook hyung haciéndome mimos en mi cabello.

Creo que te queda bien. -Al verlo a los ojos sonrió, ¿Porque tiene que ser tan lindo? Sin dejarme responder camino hasta la puerta de salida para detenerse. Te veré luego, Jin. -Quise decir algo pero de nuevo me atacó con su sonrisa, una vez que salió no pude evitar hacer unos pasos de baile para celebrar, retiro lo dicho ¡Este es el mejor día de mi vida! Espera ¿Cómo sabe mi nombre?

Crazy, Sexy, Cool | KOOKJINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora