Zayn miraba serio toda la escena, yo me mantuve callada. No quería seguir metiendo la pata. Porque a pesar de que no me lo había dicho, sabía que la había metido y talvez; bien profunda.
—Creo que debemos irnos—Susurre.
—Sí, sí, sí. —Grito Fátima, a continuación, se acercó a mí, me hinque y esta besó mi mejilla derecha.
—Vamos—Dijo Zayn. La madre lo miro confundida. ¿Quién no lo estaría? Hasta yo lo estaba.
El comenzó a caminar hacia afuera sin siquiera despedirse de su madre. Que mal agradecido, mientras yo aquí deseando tener una e irme con ella lejos de mi ahora; odioso padre. Tome un fuerte suspiro y mire a la madre de Zayn.
—Discúlpalo—Hablo ella antes de que yo dijera algo.
Negué—Tranquila—Sonreí—Tu deberías disculparlo, fue algo seco contigo.
—Ya estoy acostumbrada. Se puso así ya que sabe que no lo dejo salir mucho a pesar de que ya es mayor de edad.
Ahora tenía sentido, él no quería que su madre se enterara que él me conoció en una fiesta, que era más pub que fiesta, ya que todos estaban por todas partes. Si no fuera porque me invito vero, juraría que eso no era una fiesta de cumpleaños, sino un baile de adolescentes.
—Debo irme. Mucho gusto—Sonreí, ella se acercó y tomo mi brazo atrayendo mi cuerpo al suyo y besando mi mejilla tiernamente para luego dar un gran abrazo.
—Igualmente, linda. —Separo su cuerpo del mío sonriendo. Luego miro mi bolso.
—Creo que tendrías que tener cuidado con esas cosas valiosas por aquí. Es un barrio peligroso. —Dijo mirándome.
Mire mi bolso, y luego volví a ella—Cierto—Comencé a quitar lo poco que tenía dentro: Lentes de sol, mi celular y mi cartera con el dinero—Tenga, ahora es suya—Sonreí, pero esta negó rápidamente.
—No, muchas gracias, pero no.
—Claro que si—Sonreí.
—No.
—Acéptelo como regalo de cumpleaños
—Fue hace 4 meses—Murmuró divertida.
—Atrasado—Sonreí dándole mi amado bolso.
—Es demasiado caro para mí—Susurro.
—De vez en cuando debes de darte gustos—Sonreí, ella sonrió tiernamente. Antes de que me arrepintiese de dar mi amado bolso, tome bien fuerte mi teléfono y salí de la casa acompañada hasta la puerta por ella.
—Que la pasen lindo—Sonrió.
***
—Este, este—Recorría Fátima entusiasmada toda la tienda.
—Elije todos los que quieras linda, son regalos de mi parte—Sonrió ___
—___—Llamo Zayn.
—Dime cariño—Lo mire.
—Quiero salir de la droga—Dijo—Pero antes de la venta. El consumo lo puedo ir dejando más adelante—Lo mire sonriente, claro que sí, no quería un novio drogadicto ni nada por el estilo.
—Me parece genial, te ayudare en todo—Sonreí. Fáti volvió con los vestidos, que sin exagerar eran máximo 15 y todos colores brillosos. Sonreí, ya que cuando yo era pequeña, amaba esos vestidos, y de la misma tienda.
Fui a la caja y pague todo, me dio la boleta de cuanto era todo y Zayn la quito de mi mano.
—___—Dijo molesto—Esto es demasiado dinero, no creo poder pagarlo tan pronto.
—¿Quién dijo que lo hicieras?
—___, enserio, es mucho.
—No me importa, quiero complacer a Fáti.
—Te amo
—Yo más, Zayn. Yo te amo más.
***
#Zayn
___ me dejó donde le pedí, ella dejaría a Fáti en casa. Había desayunado y ya estaba lleno. Seguí mi camino dentro la fábrica y me encontré con mi destino, lucio y Roberto.
—Hey—Hable.
—Malik—Saludaron a la vez tendiendo su mano, acepte sus saludos.
—Roberto, tengo que hablar contigo— Este le dio una mirada a lucio que enseguida entendió que debía dejarnos solos.
—Escúpelo
—Bueno, quiero salir de esto—Dije sin pelos en la lengua.
Su carcajada se oyó por todo el lugar haciendo “eco”
—No puedes
—Vamos, debe haber algo. Siempre cumplí con todo.
—Bien. —Roberto pensó—Tu novia. La riquilla esa. Tiene mucho dinero, robaremos su casa y luego saldrás de esto.
—Vamos Roberto, no puedes hablar enserio. No quiero problemas en esta relación.
— ¿Cuándo es el cumpleaños?
—En 3 semanas
—Venderás mercancía ahí.
—Roberto—Reproche.
—¿Quieres salir de esto o no?
—Si.
—Pues ya sabes.
No quería hacerlo, ¿Por qué me metí en esto? Pude comenzar una carrera, pero no, tuve que meterme en esta mierda.
—Bien, lo haré.
