Pensamientos absurdos en noches de insomnio

Carta 20.12.2020

Sabes quien eres,

Hace poco fui a una boda. Desde el inicio, fue la música lo que me recordó a ti. Los violines cantaban sobre la vida en rosa a tu lado, y que por decreto de la reina te convertirías en el amor de mi vida. Recordé aquellas noches en las que hablamos sobre la nuestra, en el enorme jardín de la casa de mis sueños. Asistirían amigos y familiares cercanos. Tú tocarías la guitarra y yo cantaría a tu lado, tomados de las manos. Bailaríamos juntos mientras volaríamos hacia la luna, mientras que de noche apreciaría la forma en la que la luna iluminaría tus oscuros y profundos ojos de abril. Te abrazaría fuertemente, posando mi cabeza sobre tu hombro. Sería el mejor día de nuestras vidas, compartiendo nuestro amor con aquellos a quienes también amamos. Al pasar de mi estadía allí, los recuerdos se tornaban en grises. Ha pasado mucho tiempo desde aquellas noches en las que hablamos juntos sobre nuestros sueños y futuro. Ahora solo somos desconocidos, personas lejanas que no pudieron verse a los ojos cuando aún eran cercanos. Nunca pude abrazarte, ni tomar tu mano. He aprendido lentamente a dejarte ir ¿Pero qué más puedo hacer? Es como si al tratar de olvidarte nada más importara. No puedo escuchar más una guitarra sin invocar un recuerdo a tu lado. Quisiera poder admirar tu sonrisa, apreciar tus ojos noche por última vez. Pero tal vez ya sea tarde, tu ya me has reemplazado, o al menos muchos rumoran ahí. A pesar de lo último que pasó entre nosotros, no olvidaré los buenos momentos a tu lado. ¿Podré algún día sin soltarte, dejarte ir? Tal vez me sea imposible. Deposité todo de mí en tí, finalmente terminando lastimada. Creí que tu eras la persona correcta, ¿o habrá sido el momento equivocado? Es de noche y tus recuerdos me mantienen despierta. Ha sido así cada día desde tu partida, noches nostálgicas y llenas de preguntas. Mi corazón es frágil, es probable que nunca pueda soltarte y seguir adelante. Espero poder verte, y por lo menos abrazarte si es que me lo permites. Despedirme de tí si es que así lo deseas, cortando el lazo de forma adecuada.

Probablemente te amaré por siempre. Amar es una palabra llena de significado, aunque para mí ahora carece de sentido, ¿para tí qué significa?

Por ahora me desvaneceré con el polvo, escribiré una carta final de despedida en el momento oportuno. Necesito una nueva oportunidad, volver a comenzar. Las preguntas invaden mi cabeza cada noche. ¿Qué pasa ahora? Siempre eres tú, los recuerdos me agobian de nuevo. Esta vez pasando a los últimos momentos, noches llenas de tristeza. Te hablaré de ellas alguna otra noche de insomnio más. Mis palabras hoy han carecido de sentido.