Conduzco con cuidado pero con celeridad pues tengo muchas ganas de llegar a casa lo antes posible.
En los asientos de atrás conversan animadamente Carla y su nueva amiga Susana. Hay momentos en que se siento como si fuera un chofer de lujo, conduciendo un coche de alta gama al servicio de una elegante y sofisticada dama.
Tengo puesta la música con un volumen muy bajo a ver si puedo pescar algo de la conversación, pues aunque utilizan un tono normal, al hablar tan rápido y se interrumpen tan a menudo me cuesta seguirlas.
Se ríen muy frecuentemente, lo que demuestra su gran sintonía. Me siento un poco desplazado y tengo sana envidia por su gran capacidad de establecer relaciones amigables tan rápidamente.
Mientras esperamos que la reja automática que da acceso a la casa, escucho la expresión de admiración de Susana. Ya estamos plenamente en la segunda fase de la estrategia de mi querida Carla Fase 1: Ganar su confianza, completada; Fase 2: Deslumbramiento, en proceso.
Detengo el vehículo en la entrada y las dos saltan impacientes hacia la casa. A continuación me dirijo hacia el garaje ansioso por reunirme con ellas. No quiero perderme ni un solo minuto del cortejo.
Esta tarde Cala y yo nos hemos dejado caer por una mega tienda de ropa. En la sección de mujer mi esposa ha montado guardia como si fuese una leona que espera a una joven gacela con la que pueda satisfacer su voraz apetito.
Como cazadora experta tantea el terreno y busca los indicios que le conduzcan a la "victima perfecta".
Enseguida he visto que Susana reunía todos los requisitos, y Carla se ha lanzado a por ella. Susana es una chica de unos veinte años, 1,70 m de altura, ligeramente gorda y con una cara redondeada llena de inocencia, Es muy guapa, con rasgos muy sensuales pero sin explotar todavía.
Cualquiera que la observe diría que es una mujer discreta en el cuerpo de una muñeca grande, llena de inocencia y un gran potencial de sensualidad.
Carla tiene una bella figura , pese a que pasa de los cuarenta mantiene un cuerpo envidiable Tiene unas piernas muy bien torneadas, el trasero es de revista, y unos enormes pechos además de un rostro angelical. Viéndola nadie diría que hace unos pocos años sufrió sobrepeso debido a una enfermedad con la tiroides. Por suerte, la supero completamente y ahora tiene un cuerpazo que me admira y ella cuida
Cuando entra en contacto de "una posible victima", con cualquier excusa Carla tantea el terreno, para ver si dar o no el siguiente paso.
Veo que Susana ha aceptado y ambas disfrutan de una sintonía extraordinaria.
Entro en el salón y me sirvo una copa. Ellas dos deben estar en una habitación probándose la lencería que hay arrinconados en un armario.
Vienen las dos muy contentas hasta mi para lucir la lencería que compre para ellas . Carla lleva un sostén y un calzón negro muy ceñido que le dibuja perfectamente su cuerpo. Zapatos de aguja muy altos y un collar de perlas. Está sublime. Es elegancia pura logrando que me sienta muy complacido y orgulloso de que sea mi pareja.
Susana lleva un atuendo veraniego, blanco con estampados pequeños azules
me incorporo de un salto, tomo a mi pareja por la cintura y le robo un beso para mostrarle mi rendición ante su magnífica imagen. A continuación, tomo a Susana e improviso unos pocos pasos de baile ante su sorpresa y complacencia.
- ¡Que sorpresa tan maravillosa!, las dos están perfectas, que vista tan deliciosa", exclamo tras observarlas de arriba abajo varias veces incrédulo de lo que veo.
Carla se me acerca y me da un beso muy complacida por mi reacción. Susana, tímidamente, sigue el ejemplo y también me da un beso en la mejilla.
- "Carla tú estás maravillosa, pero tengo que decir que Susana me ha hecho recordarte como eras hace unos años, me ha dado un vuelco el corazón al ver de nuevo ese atuendo les digo con los ojos como platos y un hilo de temblor en la voz.
- Ya te lo había dicho. Te sienta estupendamente Susana
Doy un pequeño manotazo al trasero de Susana Ella se vuelve rápido fingiendo un cierto enfado, a lo que los tres respondemos con varias carcajadas.
- "Me has recodado tanto a Carla, que no me he podido contener. Se lo hacía a ella, no le gustaba mucho, pero a mí me ponía a cien. Esa lencería es sensacional, no sabes dónde mirar, al escote o al trasero
Carla y Susana me perdonan la licencia, me dan otro beso cada una y se van muy contentas a aprobarse un nuevo atuendo
Antes de retirarse, Carla aconseja a Susana que llame por teléfono a su familia avisando que llegará tarde y no la esperen para cenar. Ella primero llama a su novio y luego a casa.
"Hola cari... que estoy en casa de Nuri... si , si... ha vuelto a discutir con su novio y está deprimida... si, si ya lo se... perdona pero me quedo con ella para hacerle compañía...un besote... no te vayas por ahí de botellón, si, si... yo también te quiero... muach", y cuelga.
- "Hola mamá... estoy en casa de Nuri que no se encuentra bien, me voy a quedar a dormir con ella. Si.... qué si... claro.... Adiooooos " y cuelga.
Con total tranquilidad las veo desparecer por el pasillo. Tomo un sorbo de la bebida que me había preparado, respiro hondo y tomo conciencia de que me he puesto muy caliente viendo a mi mujer tan elegante, a Susana tan bomboncito y tratando de imaginar lo que puede venir a continuación.
Pasan los minutos y como no dan señales de vida voy a su encuentro no hay ni rastro de ellas. Me encamino hacia nuestro dormitorio, y es allí donde las encuentro una al lado de la otra.
- "Mi querida Susana... qué bonita eres... tranquila, tranquila...qué ojos, qué boca...me gustas tanto", dice Carla mientras le come la boca entre frase y frase.
Susana tarda un poco en reaccionar pero pronto se rinde a las caricias y besos de mi mujer de los besos pasan a cariñosas caricias, primero en la cara, luego en el cuello y los hombros. Se desnudan mutuamente .Carla luce un diminuto calzón negro de encaje que le sientan maravillosamente. Susana lleva unos calzones blancos con pequeños corazoncitos rojos más clásicas e inocentes. Se echan sobre la cama, fundiéndose en un largo beso. Luego vienen las caricias mutuas y largas miradas a los ojos.
Mi papel en este momento es totalmente secundario, por lo que me siento fuera de lugar y me dispongo a disfrutar de la escena. Conozco a Carla y se seguro que vamos a pasar un buen rato.
Carla se coloca de medio lado en su costado, parcialmente levantada para poder besarla y alcanzar con su mano la entrepierna acompañando una serie interminable de besos,
Carla se da cuenta que la fase 3: la seducción está completada y pasamos a la siguiente.
Yo estoy disfrutando de la vision poco a poco me he ido desprendiendo de la ropa
De repente Susana empieza a dar grititos entrecortados anunciando su inminente orgasmo.
Durante unos instantes siguen los espasmos incontrolados, y los grititos. Después el silencio y la quietud, para dar lugar a lo que parecen sollozos entrecortados
Cariño, qué te sucede... por favor, no llores... qué te pasa, le dice Carla tratando de consolarla.
- No lo he podido evitar...
A mí me hace señas indicándome de que vamos a pasar una noche inolvidable.
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Mister encantos
RomanceMi nombre es Marco Lombardi y muchas mujeres dicen que soy bastante atractivo. No paso de los treinta años, mido un metro ochenta y cuatro , de complexión atlética, piernas largas y torneadas, cuello extenso, ancha espalda, brazos musculosos y un...