Me fui a mi casa y pase la noche entre papeles pensando que habría pasado con Lucía y Valle. y como era de esperar me quede dormida dentro de otra pesadilla.
Esta vez me desperté en un bosque por la noche, había una niebla espesa y una luz a lo lejos mire al alrededor y me adentre en la penumbra.
Estuve 5 minutos andando observando todo hasta que un aullido me alertó, me quedé parada mientras el aullido continuaba. En cuanto paro me cobije debajo de un árbol, mi mano rozó suavemente el tronco y desapareció el árbol entero, me sobresalte y me eche un paso para atrás y mi pie se enredo con una rama y me caí de cara contra el suelo,mis manos se apoyaron en el suelo y este desapareció en mis ojos y me caí al vacío.
Estuve unos 20 segundos cayendo sin pausa hacia abajo, si eso se suponía que era abajo. Hasta que me incorpore y mis pies tocaron suelo yo no veía nada si no sólo un fondo blanco, mis pies estaban sobre un suelo que no podía ver.
Tenia miedo de que si mis manos tocaban el suelo me volvería a caer pero esta vez no habría suelo si no un vacío eterno.
Metí mis manos el los bolsillos de mi sudadera con cuidado y continúe andando, y de pronto me choque sin sentido contra el suelo creí que esta vez fue porque me iba a despertar pero aparecí de nuevo en el bosque. No se que hacía otra vez allí, ya estaba acostumbrada a la luz blanca pero ahora es de noche y tarde un rato más en adaptarme.
Tras adaptarme a la oscuridad puede apreciar que a mi izquierda había como una puerta y a la derecha una luz. Fui a la derecha porque mi cuerpo tenía curiosidad, . Ande ande y no pare de andar hasta darme cuenta de que segia en el mismo lugar a mi izquierda seguí la puerta y a la derecha la luz. Era todo muy raro, salí corriendo y parecio que avanzaba un poco pero no fue el caso seguía en el mismo lugar. Ya harta me quede parada y me puse a recordar:-era parecido a un sueño que tuve de pequeña pero lo peor era lo que venía a continuación.
Empece a escuchar susurros muchos muchos muchos que me decían:ya es la hora, esta noche te tocará a ti, no intentes pararnos...
De repente vino un frío glacial que no podía aguantar. Me metí las manos en mi forro polar y me subí la cremallera, estaba helada.
Segui andando evitando pararme hasta que me desbaneci en el suelo por la culpa del frio.
