Amor en Ludi Harpastum (FanficGenshin)

Desenlace

Hotaru y Sora: 1, 2, - besaron la bola y la lanzaron. - Tanto Amber como Xiao, fueron capaces de ver esto último lo que hizo que se decidieran aún más a conseguir aquello. Para el segundo no fue tan complicado, ya que antes de que ni siquiera llegara cercana al suelo, este se ayudó de una de las paredes para impulsarse a cogerla y así se hizo con ella. Sin embargo el otro pensó que no lo conseguiría pero digamos que sus amigos no pensaban lo mismo, ya que Razor lo agarró por la camiseta y lo lanzó hasta tener a mano y poder atrapar la otra harpastum. Tras esto calló al suelo haciéndose algunos cardenales pero nada grave.

Al ver esto mucha gente se quedó boquiabierta, y vitoreó. El evento había sido de lo más curioso, nunca antes había pasado. Sin embargo alguno de los participantes se quejaba, no les parecía justo aquello, y casi descalifican a Amber, de no ser porque en aquel momento apareció Xingchiu para aclarar el malentendido.

Albedo: - Eso no está permitido, habéis echo trampa.

Xingchiu: - Lo siento pero en las normas no dice nada de arrojar personas. - Sonreía mientras observaba como seguía quejándose el otro junto con su grupo. Mientras esto ocurría apareció Hotaru que rápidamente se acercó a Amber quien seguía sentado en el suelo. Miraba la harpastum nervioso, pensando en como reaccionaría la chica a la que se había prometido declararse, sin percatarse de que la misma se acercó a él y lo abrazó contenta. Cuando notó la calidez de la misma este correspondió el mismo. 

Hotaru se retiró miró a Amber a los ojos y antes de que el moreno pudiera gesticular palabra alguna, la chica plantó un beso en sus labios. De esta forma se puso fin a la discusión, y tanto unos como otros tuvieron que aceptar aquello. Ya no importaba, ella se había decidido y nadie podría interferir.

Mientras tanto desde no muy lejos un Sora con una expresión bastante feliz, observaba la tierna escena. Por fin su hermana había sido sincera, ahora le tocaba serlo a él. Perdido en sus pensamientos no se percató de que Xiao se colocó a su lado. El joven lo observaba sin decir una palabra. En ese momento el rubio giró su cabeza para así toparse con la mirada de ojos dorados que lo observaban de cerca. 

En ese mismo instante comenzó a soplar un ligera brisa que hacía mover sus cabellos, entonces Xiao tomo la mano de Sora, colocándola en su pecho sin apartar sus pupilas de su amado rubio. Quería que notara los latidos de su corazón, lo nervioso que estaba al estar al lado suyo, y que no era capaz de describir con palabras. Por otro lado Sora, no podía creer lo que estaba notando. Dirigió su mirada hacia la mano posada sobre el pecho del otro, y totalmente sorprendido volvió a mirar hacia la cara del mismo, quien daba a entender con su expresión lo feliz que estaba. 

No quedó nada que decir por parte del mayor, tan solo el joven que parecía mudo ahora era el encargado de hablar o mostrar lo que sentía con acciones. Y así lo hizo. Antes de que ninguno de los presentes dijera nada tomó la mano del otro y lo arrastró lejos de allí hasta llevarlo a un lugar tranquilo que le permitiera hablar sin ser interrumpidos.

Lo arrastró durante un buen rato hasta que terminaron en las afueras. En un lugar alto desde el que se tenían muy buenas vistas de la ciudad. Sin pensarlo más tiempo ni plantearse nada tomo ejemplo de su hermana, lo agarró de la camiseta y lo besó. Al poco tiempo se separó, para poder sincerarse, aunque poco había que decir tras aquello.

Sora: - Xiao, yo... te amo. Siempre, desde hace tanto que ya ni me acuerdo tengo estos sentimientos que no me dejan... - unas lágrimas brotaron de sus lindos ojos, dando al otro una excusa para tocar las mejillas de su amado para así poder limpiarlas y dejar un beso que lo calmara un poco. - Dime algo, la persona... - se detuvo, tenía miedo a preguntar, pero continuó ya que si había una oportunidad quería saberla. - La persona que estuvo en la enfermería cuando yo me desmayé, ¿eras tú?, ¿tú me besaste?- Xiao se sorprendió lo que continuó con una sonrisa.

Xiao: - Así que me has descubierto. Si así es, yo te besé, y esperaba que eso se repitiera. - Con esta frase como confesión, acercó su cara a la del pequeño apoyando primero su frente en la del otro, y posteriormente besando esta, tras lo cual se separó un poco y volvieron a fundirse en un hermoso beso acompañados por la brisa y un atardecer que jamás olvidarían.

THE END