Seña 2

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Atsushi puso con cuidado los platos sobre la mesa, suspirando y observando su comida por unos segundos, asegurándose que se viese bien a la vista, y rezando para que el sabor también estuviese bien

Así una vez se convencía que la comida se veía aceptable, avanzó a la puerta, tocándola con cuidado llamando a Akutagawa —e-esta listo– dijó tembloroso, y se exaltó al Akutagawa abrir la puerta, dando una seña con su puño moviéndolo de forma ligera de arriba a abajo —eso...significa "si" ¿verdad– Akutagawa asintió con la cabeza, dirigiéndose a la mesa y sentándose, Atsushi hizo lo mismo y le miró de vuelta para ver si Akutagawa daba una buena reacción a su comida

Akutagawa acercó su mano cerca de su boca y luego la alejó, haciendo lo mismo dos veces, Atsushi miró al libro, abriendo y mirando sus páginas rápidamente —eso...eso es...– se concentró en las señas, aunque Akutagawa tomó un trozo de papel y lo escribió, "Gracias", eso era lo que significaba su seña —y-ya veo...– Atsushi dejó el libro a un lado, juntando ambas de sus manos frente a la comida —gracias por la comida– tomó los palillos entre sus manos y comenzó a comer

Mientras comían claramente no podrían mantener una conversación, pero el silencio se sentía pesado e incomodo —¿sabe bien?– Akutagawa asintió ante la pregunta del tigre —¿seguro? Cuando quieras comer algo puedes decirme– sonrió intentando parecer amable ante el de cabellos negros, quien escribió en el papel de nuevo "gracias, me aseguraré de hacerlo", Atsushi leyó y asintió con la cabeza, Akutagawa terminó de comer, tomando el libro de señas entre sus manos, abriendo de las primeras páginas

Akutagawa miró el libro por unos momentos, y luego miró a Atsushi —¿sucede algo con el libro?– pregunto y Akutagawa negó, dejando el plato a un lado y abriendo el libro sobre la mesa, señalando una seña con su dedo índice —ho-la– hizo la seña con su mano, poniendo dos dedos sobre su cabeza y enviándolos en dirección a Akutagawa —la seña...¿estuvo bien echa?– el contrario asintió, comenzando a señalar otra imagen —adiós...oh, esa es fácil– solo se despidió con la mano de forma natural, y Akutagawa señaló otra imagen, Atsushi subió una de sus manos en forma vertical, poniendo la otra sobre esta de forma horizontal con la palma hacia adentro —eso es buenos días– Akutagawa negó —eh...¿no es así?– Akutagawa seguía negando, levantándose ligeramente de la mesa, cambiando la posición de la mano que estaba de forma vertical, indicándole que la palma de esta también debería estar viendo hacia adentro y no hacia la persona a la que se le dirige el saludo —oh! Entiendo, entiendo– sonrió haciendo la seña de nuevo —bueno días, ¿verdad?– ahora Akutagawa asintió

Así siguieron un buen rato, entre señas simples como "si", "no", "ya" y otras palabras simples, hasta llegar a oraciones algo más largas como "hola, buenos días" o "buenas noches, hasta luego"

Después de un tiempo, Akutagawa cerró el libro y lo entrego a Atsushi, quien lo tomó y luego miró a los ojos del contrario —¿eso es todo por hoy?– Akutagawa asintió, "es tarde" dijo con una seña la cual Atsushi logró comprender —ah...¡tienes razón!, lo siento, no hice otras cosas de tu lista y-— Akutagawa movió sus manos de arriba a abajo de forma lenta calmando a Atsushi, moviendo sus manos dando una la seña "mañana"

Atsushi comprendió, asintiendo con la cabeza —entiendo, vendré mañana entonces– sonrió, Akutagawa se cubrió la boca y luego dio una serie de señas —e-eh...no entendí, ¿podrías escribirlo?– Akutagawa negó con la cabeza, puesto que sus señas habían dicho "realmente eres obediente" así que solo decidió dejarlo pasar

Después de recoger la mesa y lavar los platos, Atsushi miró a Akutagawa desde el marco de la puerta —nos vemos mañana, entonces– se despidió tranquilo —llegaré a las 8 y me iré a las 5, ¿está eso bien?– dijo antes de salir, y Akutagawa asintió, así Atsushi salió, y Akutagawa cerró la puerta una vez este ya se había alejado, "mientras no sepas lenguaje de señas, puedo decirte cualquier infinidad de cosas" pensó y sonrió para si mismo

Atsushi caminaba tranquilo hasta encontrar un taxi, así dentro de este, miró el mensaje de Dazai que le indicaba que le llamara una vez que hubiese salido de la casa de Akutagawa, así que lo hizo, acercó el teléfono a su oreja escuchando el número marcarse y por fin la voz de Dazai al otro lado del teléfono

—¿qué tal estuvo?– Preguntó Dazai de inmediato, a lo cual Atsushi se quedó unos momentos en silencio —Akutagawa esta...siendo más amable– sonrió algo ido en sus recientes recuerdos del día —aprendí un poco sobre las señas hoy, creo que pronto podremos hablar de forma más fluida– al escuchar eso, Dazai sonrió al otro lado del teléfono —mis subordinados se llevan bien, que inusual– se burló aunque la risa sonaba algo tranquila

Atsushi solo siguió sonriendo ignorando ligeramente a Dazai, aunque de inmediato recordando que este se había dignado a llevarlo a la casa de Akutagawa sin decirle nada y sin mencionarle que debía saber lenguaje de señas, —Dazai-san– dijo y Dazai tembló ante el tono de voz que se escuchaba, no necesitaba ver a Atsushi para saber que este estaba algo (bastante) inquieto (molesto) con el

—dime...Atsushi-kun– Atsushi tomó aire —realmente no me incomoda estar con Akutagawa, pero...tú podías decirme fácilmente que me preparara con lenguaje de señas– Dazai quedó en silencio, el contrario no se equivocaba —lo sé, pero si no tenían algo de que hablar el que él te enseñase a aprender rompería el hielo– esa era la excusa por la cual lo había echo, así que también era creíble, así que Atsushi suspiró —si...tienes razón, Dazai-san— colgó sin darle realmente espacio a Dazai para despedirse, mirando por la ventana del taxi hasta llegar al lugar que el suicida le había dado para vivir, pagándole al hombre que había conducido, bajándose del auto y mirando  el lugar

Atsushi miró el cielo de noche, mirando la luna con cierta atención —bueno...es luna nueva...quizás eso marque este inicio– susurró para si mismo para luego entrar a su pequeño lugar, e ir a dormir.

Continuará...

Shin Soukoku - Sintiendo las palabras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora