¿Qué es tan real en la vida para que sepas que lo es? Un simple beso, ¿puede ser real tanto como el amor que siento por ti? ¿Tú eres real? Mis ideas divagan por mi cabeza, y no encuentro la solución a todo esto, te quiero conmigo, pero cuando te ten...
Luego de marcharse sus padres, nos quedamos solas, Reachell puso música para divertirnos un rato y empezó a bailar sola, dando pequeños giros y saltitos con los ojos cerrados, mientras yo de lejos la miraba por completo.
Creo que fui muy obvia porque luego de un momento se detuvo y me miró fijamente, y largó una carcajada.
(Reachell): -¿Qué tanto miras? Ven a bailar conmigo.
Me dirigí a ella y comencé a seguirle la corriente, quién diría que hace un rato atrás nos estábamos besando, y ahora compartíamos un momento agradable como simples amigas como si nada hubiera pasado.
Me detuve y me dirigí hacia la comida, para darle el último retoque y ya servirla.
(Reachell): -Que bien huele eso, ¿te puedo adoptar?-
(Yo): -Para el resto de tu vida.- Y me reí apenada. Ella también se rió y me lanzó un beso con sus labios a lo lejos, ¡joder! que ganas de besar esos labios.
Pusimos la mesa para poder comer, mientras tanto jugábamos quién cogía los cubiertos y los vasos primero, para colocarlos en su lugar, y claro... de paso, podíamos sentir nuestros cuerpos, nuestras manos rozarse, o... empujones a modo juego.
Nos sentamos una al lado de la otra, con los brazos pegados prácticamente, yo no podía dejar de mirarla y sonreírle, y ella también a mi, hablábamos de lo que sea.
(Yo): -Tengo que pasar por casa para avisarle a mamá y recoger unas cosas... así luego podemos pasar por el súper a comprar cositas ricas.-
(Reachell): -Claro, voy contigo Bae, por cierto, te quedó muy rico esto.
(Yo): -Si bueno... cuando no hay otra cosa para comer cualquiera dice eso- Me reí.
Reachell se puso seria y se acercó a mi cara. -En serio, es la mejor pasta del mundo.- Me dijo casi susurrando sintiendo su aliento en mí, la miré a los labios y me moría por lanzarme ahí mismo... mantuve la cordura.
(Yo): -¿Y qué planes hay para esta noche?
(Reachell): -Pues Jack organizará una fiesta por la bienvenida a clases ¿Te gustaría ir?
(Yo): -Tú sabes que no soy mucho de fiestas, pero si tú quieres ir yo te acompaño no hay problema.
Nos pusimos de acuerdo y seguimos conversando y comiendo, mirándonos los labios, sonriéndonos, pero comportándonos.
Luego de comer limpiamos todo para poder ir por mi casa.
Cogimos el auto de sus padres ya que se habían ido en taxi al aeropuerto, y nos dirigimos hacia casa. El camino no era muy largo, pero no hablamos mucho, solo cosas sin sentido o sin importancia.
Cuando llegamos mamá no estaba, pero sí Frank, me miró medio desafiante sonriendo, él sabía que estaba enamorada de ella.
(Reachell): -Hola Frank.
(Frank): -Hola Reach ¿cómo estás?
(Reachell): -Bien gracias espero que tú también.
(Frank): -Así es, me alegro por ti, subiré que me está esperando Alena arriba, veremos unas pelis.- Y sonrió.
(Yo): -Sí claro... pelis...- Y me reí también. -Por cierto Frank, los papás de Reach tuvieron que viajar, así que me quedaré tres días en su casa, dile a mamá, vine por ropa y que se quede tranquila que no faltaremos a clases. Él asintió con la cabeza mientras Reachell me decía a modo susurro y burla -Sí... como hoy.- Y le tiré una mirada desafiante pero riéndome.
Nos dirigimos a mi habitación y Reach se tiró sobre mi cama.
(Yo): -Oye Reach, me ducharé, prende la tv si gustas.
(Reachell): -Vale Bae, no te preocupes- Ella me miraba atentamente mientras yo recogía mi ropa, yo la miraba de vez en cuando, a pesar de que había prendido la tele aún me sentía observada por ella.
Me metí a la ducha y comencé a pensar en todo lo que estaba pasando, no parecía real todo, es que había pasado tan rápido que no sabía como actuar de ahora en más.
Sentí que Reach puso un canal de música en la tv y alzó el volumen, estaba tan alto que si alguien hablara ni se escucharía.
Al terminar de ducharme noté que no había traido la toalla ¡Rayos! y con la tv tan alta dudaba que ella me escuchara, aún así empecé a gritar su nombre... -¡Oye Reach! y seguí así por unos minutos pero sin tener resultados.
De repente siento que golpean la puerta, y se estira una mano con la toalla.
(Reachell): -Oye tonta, te olvidaste la toalla como siempre.
(Yo): -Pues sí... te estaba llamando pero con la música no se escuchaba, ¿me la alcanzas?- Mientras asomaba mi cara por la cortina de baño.
Reachell pasó mirándome fijamente y estiró su brazo hacia el mío, o lo que pensaba que era mi brazo detrás de la cortina.
Le contesté con un gracias y una sonrisa... y ella salió del baño a saltitos cerrando la puerta. Joder que situación más rara.
Aún era temprano, así que llevaría la ropa de la fiesta para ponerme en la casa de Reach, me puse un jean cómodo y una camiseta negra a rayas, acompañado de unas zapatillas blancas.
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Salí del baño con la toalla en la cabeza y me senté en la cama, Reach seguía acostada en ella, apenas aparecí en la puerta ella cambió su mirada de la tv hacia mi.
Se incorporó en la cama y se dispuso a hablarme. -¿Quieres que te peine?
(Yo): -Sí, está bien.
Ella se sentó cerca de la orilla de la cama abriendo las piernas... y llamándome a sentarme ahí...
Cojí el cepillo y me acerqué hacia ella, Reach cogió la toalla que me envolvía el cabello y dejó que cayera sobre mis hombros.
Pasó sus manos por ellos apretándolos un poco a modo de masajes, corrió mi cabello hacia un costado y me dio un tierno beso en el cuello que hizo que mi cuerpo se estremeciera...
Comenzó a pasarme delicadamente el cepillo sobre mi cabello.
Cuando terminó me dijo -Listo- Sonriendo.
Giré mi cabeza hacia ella para agradecerle y nuestros rostros quedaron muy cerca el uno del otro, le dije que gracias y nos quedamos mirándonos en silencio, ella me miró y se mordió el labio, de pronto no me aguanté más y tuve que hacer algo.
