Shades of red *MJ*

Capítulo 14

 Después de prepararse, lo cual no fue tanto, simplemente ponerse una camisa simple y una chaqueta, Jinyoung esperó a Wonpil, quien vendría a él alrededor de las 6 pm.

No tuvo que esperar mucho hasta que su novio llegó antes de las 6.

- ¿Listo? - preguntó Wonpil cuando Jinyoung abrió la puerta.

- Sí, iré a tomar mis cosas. Entonces podemos irnos.

Salieron en el coche de Wonpil. El viaje fue bastante largo; y la ciudad ya estaba iluminada por las luces eléctricas.

- ¿Has estado antes allí? - preguntó Jinyoung.

- Solo una o dos veces, de hecho visité más su casa anterior. Eso fue durante los años universitarios, pero esta mansión es nuev, y Mark comenzó a vivir allí solo un tiempo después de su graduación. Como de alguna manera nos perdimos el contacto, solo una o dos veces recuerdo haber visitado su mansión - dijo Wonpil, con los ojos fijos en el camino por delante.

Después de aproximadamente media hora, Wonpil se detuvo frente a una mansión moderna iluminada desde todo el patio hasta el edificio.

- ¿Es aquí?.

- Sí. Quizás, ya están comenzando.

Ambos salieron del auto y caminaron hacia la mansión tomados de la mano.

Algunas personas ya estaban allí, especialmente en el bar al aire libre que estaba detrás de la piscina. Algunos estaban en la casa de la piscina, a un lado de la está.

Toda la mansión se destacaba, era realmente hermosa, el segundo piso de la casa tenía paredes de vidrio y había un balcón envolvente, en la parte superior había una azotea.

A medida que se acercaban a la piscina, se escuchó el sonido de la música y hubo débiles risas y charlas.

- Vamos al bar - dijo Wonpil, mientras caminaban hacia éste.

A mitad de camino, vieron a Mark venir hacia ellos. Llevaba el pelo recogido y vestía un exclusivo abrigo largo, con una copa de vino en la mano.

Los ojos de Mark se fijaron instantáneamente en Jinyoung con una mirada como diciendo 'Por fin... Tenías que venir de todos modos'. Y Jinyoung, entendiéndolo tan bien, miró hacia otro lado con su estado de ánimo ya perdido.

- Mark, ¿llegamos tarde? - dijo Wonpil, tan pronto como estuvieron frente al dueño de la casa.

- Para nada. Ven. Toma barbacoa y vino, o cualquier bebida que te guste en el bar.

Mark los condujo a la barra; la música y las charlas ahora se escuchan más vívidamente.

- Hay mucha gente, aunque dijiste que no habrá mucha.

Mark asintió. Dentro del bar había mesas puestas, Jinyoung y Wonpil ocuparon uno. Inmediatamente les trajeron barbacoa, vino y whisky.

- Toma todo lo que quieras. Volveré más tarde.

- Ve, Mark, está bien. Tienes que saludar a otros invitados - dijo Wonpil.

Mark asintió y luego, antes de irse, miró a Jinyoung, que no había dicho una palabra.

Desde el bar se podía mirar el exterior, especialmente la piscina, y ver todo con claridad.

Jinyoung tomó un sorbo de vino y preparó la barbacoa. Él y Wonpil estaban sentados uno frente al otro en la mesa. Los ojos de Jinyoung vagaron por el área para mirar a la gente yendo y viniendo, algunos ya borrachos y exagerados bailando con la música.