Ónix y Miel {R27} Khr

XI

Pasó el rato y tal y como Xanxus prometió, volvió acompañado de varios profesores y alumnos que curiosos, habían escuchado los rumores y querían enterarse de lo que había pasado.

-Tenga cuidado sensei, el tipo está loco-Xanxus advirtió al profesor mientras este abría la puerta.

-Buenas tardes, sensei-saludó Reborn apoyado desde la pared.

-Buenas tardes, ¿Renato-kun? tu compañero ha venido a buscarnos gritando todo tipo de locuras, ¿podrías explicarnos lo que pasó de verdad?

-Por supuesto, la realidad es que Xanxus nos encerró a mi y a Tsuna en esta cabaña y luego se fue corriendo gritando cosas sin sentido, si os soy sincero, yo tampoco entiendo muy bien lo que le tiene que pasar por la mente para que provoque tal comportamiento.

-¡Estas mintiendo! Es verdad que yo os encerré, pero tu matastes a Dame-Tsuna y eso es cien mil veces peor-gritó Xanxus mientras animaba al profesor a entrar en la cabaña.-Lo ve sensei, en esa esquina está el cuerpo sin vida de...

-Yo no veo nada Xanxus-kun-respondió el profesor mientras examinaba la cabaña.-Si esto es una broma, que sepas que has llegado demasiado lejos, ya has admitido que encerraste a tus compañeros en contra de su voluntad, por lo cual tus actos tendrán graves consecuencias.

-Eso no importa, estoy seguro de que ese bastardo mató a Dame-Tsuna, hace un momento su cuerpo sin vida estaba en el suelo. Seguro que ese enfermo de alguna manera se deshizo de él.

-¿Y como explicas exactamente que hice eso, si fuiste tú el que me dejó aquí encerrado? ¿Qué se supone que hice? ¿Me lo comí? ¿Asesino o caníbal? Decídete, me gustaría que los cargos que se presentan contra mí fueran al menos más consistentes.

-¿Entonces cómo explicas dónde está dame-Tsuna?

-Tsuna está sentado en ese lado-respondió Reborn mientras señalaba a la derecha de la cabaña, en donde el moreno se encontraba sentado tranquilamente en el suelo.

-Buenas tardes sensei, siento no haber hablado antes, pero la cabaña cerrada, no filtra muy bien el aire y me encuentro algo mareado. Pero, puedo corroborar todo lo que dijo mi compañero. Xanxus nos encerró y luego se fue corriendo gritando todo tipo de cosas que carecían de sentido alguno.

-Esto no puede ser verdad, yo mismo lo vi muerto, yo.., yo..

-¡Se acabó! Este es un comportamiento completamente inadecuado para una persona, no solo ha afirmado haber atentado contra la salud de dos de sus compañeros, sino que ahora también presenta una actitud en donde confunde la realidad con sus fantasías. Xanxus-kun, esto es inaceptable, hasta que sepamos con seguridad si todo esto es una broma o si en verdad usted presenta algún trastorno, estará bajo la observación continua del profesorado. De igual manera, contactaremos con sus padres y deberá afrontar las consecuencias de sus acciones.

Y así fue como los profesores presentes prácticamente arrastraron a Xanxus y lo alejaron del lugar, mientras este seguía gritando y afirmando que fue testigo de mi "supuesto asesinato".

-Renato-kun, Tsunayoshi-kun. En nombre del centro os pido disculpas por el comportamiento de uno de los alumnos, pero podéis asegurar que la cosa no acabará aquí y él pagará por sus actos. Debéis estar agotados, lo mejor será que descanséis hasta que sea la hora de irnos.-nos dijo el profesor mientras que disipaba a la mayoría de los alumnos de alrededor de la cabaña, dejando solo a nuestros amigos presentes.

-JUUDAIME!!!!-el grito de mi amigo peliblanco unido al abrazo que me dio fueron las primeras cosas que me encontré al salir de la pequeña casa.-Sentí tanto miedooooo cuando Xanxus apareció ante todos diciendo que había encontrado su cadáver, juudaimeeeee, nunca me separaré de usted otra vez.