Kara está deseando que acabe el curso para disfrutar del verano con su novio y sus amigos. Ellos son la forma que tiene de evadirse de los problemas con su familia y, aunque no le hace mucha gracia comenzar bachillerato en unos meses, piensa darlo todo en el verano, como cualquier otro adolescente. Pero, ¿qué pasará cuando su novio le rompa el corazón y su familia le diga que tiene que irse con ellos de vacaciones de verano durante tres meses? Kara tendrá que dejar atrás todas las ideas que había tenido para ese verano e irse con el corazón roto a un sitio que según ella será un infierno. Sin embargo, aprenderá que en la vida no hay que dar las cosas por sentado y que aún puede disfrutar del verano, de una forma en la que ni siquiera se había imaginado. Y, ¿quién sabe? Quizás encuentre al amor de su vida...