Ashley Pieters, Jackie Bradley y Shay Thomson son tres chicas que escaparon de un internado con tan solo 15 años de edad. Esta experiencia y la falta de dinero, les motivaron al robo a mano armada. Empezaron a robar en pequeñas tiendas por alrededores. Más tarde la popularidad y sus ingenios aumentaron, con lo cual eso hizo que sus planes de robo fuesen en lugares más exitosos y de mayores ganancias, para así, aumentar sus riquezas. Las personas, con el tiempo las apodaron como "Bad Pink Girls", por su vestimenta, ya que siempre vestian de color rosa. Siempre hacían robos perfectos, y eso llamaba la atención de los policías, nunca obtenían información alguna acerca de quiénes eran las chicas detrás de esas máscaras rosadas. "Bad Pink Girls", como todos las llamaban (incluso ellas mismas se llamaban de esa forma), decidieron viajar a Estados Unidos, California, para aumentar sus ganancias en los robos. Tras su mudanza, las chicas compartiran piso con tres chicos, Daniel, Jason y Brandon, que resultan ser policías que buscan a las "Bad Pink Girls", lo que no saben es que las tiene delante de sus narices cada día. ¿Conseguirán los policías revelar la identidad de las chicas?
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