Viven entre nosotros, como humanos... aunque no lo son. tienen el poder y el control del mundo, manipulan las personas y las persuaden sigilosamente sin levantar sospechas. se ven como nosotros... pero sin duda alguna, no lo son. la belleza y la grandeza los delata ante aquellos que creen en su existencia y su majestuosidad. Yo no creo en ellos, bueno, no creía para ser más específica. Hasta hace poco, ví a uno de ellos en pleno espectáculo, fue hipnotizante, ilógico y anómalo, digno de su especie. ¿Quieres saber de quienes o quién hablo? Fácil, los dioses griegos. Sí, los mismos de los que te hablaron en clase de filosofía hasta dejarte dormido profundamente. Pero, al Dios que ví... ¡jodidos ancestros! es realmente sexy. ¿quién es? nada más y nada menos que Eros. o mejor conocido como Cupido.